Las luces de navidad se han convertido en Toledo en un tema veraniego. Todos los años el Ayuntamiento aprovecha finales de julio y comienzos de agosto para sacar a licitación el concurso para la instalación, mantenimiento, vigilancia y desmontaje del alumbrado navideño. La cantidad lleva dos años fijándose en los 210.000 euros de precio máximo y la empresa que lo viene realizando se ha convertido ya en una habitual, puesto que acumula 9 años repitiendo la experiencia.

Se trata de la cordobesa ‘Iluminaciones Ximénez’. Este año también parte como favorita en el concurso cuyo expediente fue aprobado la pasada semana. A su favor cuenta además que la polémica generada en estas últimas Navidades ha quedado ya definitivamente zanjada.

Y es que, el pasado 22 de junio un informe emitido por la Tesorería municipal acordaba que no existía inconveniente alguno para proceder a la devolución del dinero de la garantía por el contrato de instalación de las luces de navidad de 2017.

De esta forma, se confirma lo que ya se manifestó a finales del pasado mes de diciembre por parte del Consistorio, que constató que no se habían producido daños estructurales en el puente de Alcántara ni se había visto afectada la parte romana del mismo. Todo tras pedir un informe a los técnicos de patrimonio para que valoraran la situación, que fue denunciada por el Grupo Municipal Popular en el Ayuntamiento de Toledo tras mostrar fotografías donde se veía claramente como se había taladrado el puente para el anclaje de las luces.

«Una acción totalmente prohibida y para la que se necesita un permiso especial de la Junta», denunciaron en su día los ‘populares’. El Ayuntamiento no tardó en ponerse en contacto con la empresa nada más tener conocimiento del anclaje irregular de las luces y ésta procedió a corregir la situación, procediendo a colocar los vientos sin comprometer la integridad del puente, que no en vano tiene la categoría de monumento y goza de especial protección.