Todos deberíamos tener derecho a una vida sin sobresaltos, pero a algunos el destino les juega malas pasadas sin haber hecho nada para merecerlo, como una grave enfermedad. Pero la grandeza de un ser humano no se muestra cuando está de pie, sino por su capacidad de levantarse ante los golpes de la vida para ganarla. Yejemplos así, más si aparecen a una corta edad, merecen el reconocimiento público. Para honrar a uno de estos modelos de superación, la localidad de Madridejos acogerá el próximo domingo una marcha festiva, sin más intención que la de darle ánimos para que alcance una existencia mejor.
Esta vez, la gran medida de la superación la da un chaval de 14 años residente en este municipio de La Mancha toledana, Jesús Sevilla Iniesta. Desde hace un año, este chico está superando las consecuencias de un osteosarcoma, un tumor cancerígeno que afectó a los huesos de su pierna derecha. Durante un año ha tenido que combinar las sesiones de quimioterapia con operaciones y sesiones de rehabilitación, en una odisea que le ha llevado por los hospitales Mancha Centro de la cercana Alcázar de San Juan (Ciudad Real) y el Niño Jesús de Madrid, el principal centro sanitario de referencia para la infancia en España.
En este tiempo, Jesús ha soportado con la fortaleza de «un héroe», como le define su madre Sagrario Iniesta, las distintas pruebas a las que le ha sometido el cáncer. Y no sólo eso, sino que se ha ganado el sincero cariño de los que le han acompañado, como su fisioterapeuta Pilar Fernández. Esta profesional de la Sanidad destaca que el chico ha conseguido sacar lo mejor de los sanitarios que le atienden. En su caso, ha sido el desarrollo de una afición como contadora de cuentos, que Jesús disfruta escuchando en sus estancias para recuperar la movilidad de su pierna enferma.
Proyecto Unicornio.
El peculiar nombre de la iniciativa del próximo domingo, Proyecto Unicornio, nace de un peculiar entretenimiento que Jesús ha desarrollado durante su hospitalización. Consiste en coleccionar unicornios de colores, el animal mitológico con forma de caballo y un cuerno en la frente que ha protagonizado un gran número de leyendas por su capacidad de vencer a bestias mucho más grandes y fuertes. Esta característica del mítico ser se aproxima mucho a la resistencia que ha mostrado el muchacho ante la enfermedad.
La cuestión es que Pilar Fernández encontró un pequeño unicornio azul en un ‘huevo sorpresa’ de chocolate. Al regalárselo a Jesús lo acompañó con el relato de una historia en la que explicaba que a estos legendarios seres «sólo se los deja ver a la gente pura que respeta la Vida por encima de sus vidas». Al chaval le encantó la narración, hasta el punto de que se preocupó de buscar en Internet las posibilidades de que aparecieran unicornios entre los múltiples regalos de los huevos sorpresa. Y eran escasas hasta ser casi imposibles, como encontrar un trébol de cuatro hojas.
Pero la fisioterapia y el paciente emprendieron un juego para demostrar que para Jesús no hay nada imposible. Y así, con la colaboración de otros trabajadores y pacientes del Hospital alcazareño y de personas anónimas de distintos puntos de España, que participaron a través de las redes sociales, Jesús ha ido incrementando su particular granja de unicornios, hasta llegar a 18.
Pilar Fernández destaca que esta simpática busca de unicornios ha sido otra demostración más del positivismo con que Jesús logra superar las dificultades. Por ello espera que la marcha del domingo, que cubrirá un trayecto de varios kilómetros entre la parroquia madridejense y la ermita de la Virgen de Valdehierro, sirva «como un movimiento energético, para que se reconozca su lucha y se vea como un héroe, lo que es».
Por su parte, la madre de Jesús destaca de su hijo que «a mí, todos los días me da un ejemplo de vida», y confía en que la marcha sirva para dar ánimos también a otros niños que pasan por su situación y sus familias.