Izquierda Unida (IU) ha vuelto a salir a la calle para manifestar su desacuerdo con la política de instalaciones deportivas que lleva a cabo el Ayuntamiento de Toledo. En esta oportunidad, su portavoz municipal, Aurelio San Emeterio, quiso detenerse en el cerramiento que se está llevando a cabo en una de las pistas de baloncesto de la Escuela de Gimnasia.
Tal y como expresó, «no entendemos por qué quieren cerrar ahora esta pista de baloncesto y nos tememos que sea el paso previo a imponer una tasa para algo que ha sido durante más de treinta años de acceso gratuito para los toledanos». Todo ello lo enmarcó el portavoz de IU en un contexto en el que, ante los problemas que pueda tener el Patronato Deportivo, «su alternativa, la del Partido Socialista del alcalde Emiliano García-Page y también la del Partido Popular, es cerrar instalaciones y aumentar el cobro por su utilización». El motivo de cerrar esta pista en concreto lo han motivado «pequeñas disputas que se han producido toda la vida».
Para San Emeterio, esta medida no tiene como objetivo facilitar el saneamiento de las cuentas del PDM sino «asegurar la viabilidad de los negocios privados». A su juicio, «ésta no es la política que debe llevarse a cabo en la ciudad de Toledo porque, ante las dificultades, se gasta el dinero en cosas inútiles». No en vano, el portavoz de IU es consciente de que «en otras pistas de la ciudad se puede jugar al baloncesto al aire libre gratis», por lo que a su juicio el dinero debería ir a parar a «mejorar las instalaciones». Estas medidas, insistió, conllevarán «la expulsión de los usuarios del Patronato».
San Emeterio también consideró incoherente el hecho de que «se vayan a invertir 150.000 euros en pistas de acceso libre». Dejó caer que no tiene sentido «si la intención de Page es después cerrarlas y que los ciudadanos paguen».
La concejalía de Deportes, por su parte, ha respondido a las críticas de San Emeterio de forma inmediata. Así, el edil Alfonso Martín y el Patronato Municipal, mediante una nota de prensa, han precisado que el vallado de la instalación no implica que se vaya a producir un cobro por el uso. Se trata de una mejora y que «no se ha propuesto el cobro en ningún Consejo Rector, por lo que sigue siendo de libre acceso para los ciudadanos».