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El otoño está aquí, y el Ayuntamiento va a evitar que con la caída de las hojas este año se repitan los accidentes, sobre todo de personas mayores, que no ven con las baldosas levantadas del paseo de Juan Pablo II en el Polígono. La idea es arreglar de urgencia esta zona, muy deteriorada por las raíces de los árboles, y dejar para el próximo año una actuación definitiva con cargo a los fondos del convenio con la Junta de Comunidades.
Tras la caída de varias personas mayores en la zona (la última de ellas hace apenas un mes), la Asociación de Vecinos El Tajo lleva reivindicando una solución para el deteriorado firme del paseo. La Junta de Distrito del Polígono se ha retrasado a la tarde de hoy para poder contar con la presencia del concejal de Obras y Servicios, Gabriel González. Pero dada la cantidad de propuestas que desde hace tiempo viene aportando El Tajo en este área, y para agilizar la sesión plenaria, el edil se reunió el pasado lunes con la Asociación, en compañía de su compañero de Participación Ciudadana, Antonio Guijarro.
Allí una de las cuestiones sobre la mesa fue la del firme de Juan Pablo II. La idea del concejal es retirar de momento las baldosas rotas y tapar los agujeros momentáneamente con hormigón, para que no se produzcan nuevas caídas de personas mayores que, a causa de las hojas, no llegan a ver las carencias del firme. Hay que tener en cuenta que justo al lado están el hogar del jubilado y el centro de salud del barrio. La última caída fue de un hombre, que cruzaba Juan Pablo II desde este centro hasta la cercana farmacia.
La idea del Ayuntamiento es incluir dentro del convenio con la Junta de Comunidades una actuación integral en todo el paseo durante el próximo 2015. Se daría así solución a la última zona sin remodelar del entorno, tras las actuaciones en García Lorca, Gómez Manrique, el parque ‘de Híper Usera’ y la inminente actuación en la avenida de Guadarrama.
De forma previa, habrá una visita de los técnicos sobre el terreno, a los que la Asociación de Vecinos se brinda a acompañar para hacer las aportaciones oportunas.
El mercadillo. La propuesta vecinal tiene una doble intención. Por un lado, busca el arreglo del firme, que tiene ya tres décadas, y evitar caídas. Además, quiere buscar un mayor protagonismo del vial dentro del barrio, con el traslado del mercadillo del sábado. Esto permitiría además despejar el aparcamiento de la biblioteca; mejorar la accesibilidad de los pasos de peatones, que esos días quedan casi inutilizados; y sacar los coches de los comerciantes del parque del recinto ferial.
La Asociación lleva años reclamando esta posibilidad, a la espera de que el Ayuntamiento cuente con el informe de viabilidad de la Policía Local. Ahora González se ha comprometido a que, de una vez, los técnicos municipales se pasarán por el entorno para dar una respuesta definitiva.