Luces de navidad arrancan un balcón y se roza la tragedia

F. Rodríguez
-

El suceso ocurrió a las 22:00 horas del martes. El cable de sujección fue instalado en la vivienda sin la autorización de su propietaria

Luces de navidad arrancan un balcón y se roza la tragedia

Rozando la tragedia. Textual. Un hombre que paseaba con su nieta se ha salvado por centímetros de sufrir el impacto de un balcón arrancado de cuajo desde la segunda planta de un bloque de viviendas. El golpe podría haber sido fatal, pero la fortuna estuvo de su lado ante la atónita mirada de los escasos viandantes que en esos momentos transitaban por la calle. Eran poco menos de las 22:00 horas del pasado martes. Hacía escasos segundos que en la calle Panamá del barrio de Santa Teresa se había oído un gran estruendo, el que hace una cortina de luces navideñas con estructura metálica al impactar contra el suelo a la vez que arranca de cuajo el balcón al que estaba anclada.

El peso de la ornamentación navideña fue demasiado para el balcón y algunos ladrillos, que se fracturaron contra el suelo junto a un par de maceteros. Unos cascotes que afortunadamente tampoco impactaron en nadie.

El hecho de que todo ocurriera a las diez de la noche, y no por la mañana o por la tarde, cuando esta zona comercial y residencial está más transitada, sirvió para dejar todo en un susto. Un buen susto.

Luces de navidad arrancan un balcón y se roza la tragedia Luces de navidad arrancan un balcón y se roza la tragedia La Policía Local se encargó de dar aviso de la situación y se produjo la retirada de  la cortina de luces y la barandilla.  Pero no se avisó a la propietaria del inmueble de lo que había ocurrido. Ella llegó después de trabajar y si no llega a ver una foto colgada en las redes sociales no se hubiera enterado. Nadie había tratado de comunicarle lo sucedido. Marta, como así se llama esta mujer, tuvo que asomarse a su terraza para comprobar que efectivamente ya no tenía barandilla y que estaba afectada la estructura de ladrillo.

Luces de navidad arrancan un balcón y se roza la tragedia
Luces de navidad arrancan un balcón y se roza la tragedia
Para más inri, resulta que Marta había comunicado al Ayuntamiento hace meses que se negaba a prestar su fachada para anclar las luces navideñas. Pero es el segundo año que la hacen caso omiso. Ella se fue a trabajar una mañana, dejando además la puerta de la terraza abierta para que se secara la ropa, y cuando volvió a casa vio el alambre anclado a su barandilla, con el consiguiente cabreo y una fuerte sensación de vulnerabilidad, ya que el instalador pudo haber entrado sin problema en la vivienda, pese a ser una segunda planta. «Cómo voy a pensar yo que podía subir un tío en una grúa», se lamenta, para despuñes recalcar que nadie del Ayuntamiento o de la empresa instaladora se ha puesto en contacto con ella para disculparse. Ya ha puesto todo en manos de los abogados de su seguro.