No es el mercado navideño de la plaza Mayor de Madrid, pero a buen seguro que a algunos se lo recordó este puente. Desde hace unos años, el Ayuntamiento organiza para estas fechas en la plaza más significativa de la ciudad un mercadillo de productos navideños, en el que da la posibilidad a artesanos y comerciantes de la ciudad de tener el mejor escaparate. Zocodover es lugar de encuentro, de villancicos, de cabalgata de Reyes, de nacimiento, campanadas de año nuevo y también el mejor espacio para comprar algún regalo.

Porque el toledano y el visitante pueden aprovechar su paso por Zocodover para visitar el Belén municipal, comprar unas castañas, al tiempo que completa su nacimiento particular, y compra calzado, algún juguete o cosméticos naturales. Los tenderetes están en torno a la plaza, permitiendo así que continúe habiendo un gran espacio abierto de encuentro en el centro, y de paso, no dificulta la circulación en uno días de tanta afluencia de peatones al Casco.

Y si el mercadillo es un gran escaparate durante todo el mes, mucho más lo ha sido durante este puente de la Constitución, en la que miles de visitantes han acudido a la ciudad, han fotografiado la magnífica estampa de un Zocodover vestido de gala por el aniversario y han tenido un ratito para hacer sus compras.

Así lo reconocía este sábado, en un hueco entre tantas ventas, Manolo, de Belenes Loesma, para quien el puente en general «ha ido bastante bien». En estos días, está vendiendo muchos detalles para los nacimientos, fuentes o agua. Es el tercer año que su puesto de nacimientos artesanales está en el mercadillo y reconoce que es un lugar y una fecha bastante buena. De feria en artesanía a feria en artesanía, reconoce que el mercadillo de Toledo «no es el de la plaza Mayor, pero está bien». Tan sólo haría falta que entre semana, sobre todo lunes y martes, hubiera algo más de movimiento.

Por su parte, Reina Apícola es el primer año que está presente en Zocodover. Se trata de una empresa de artesanía de cosméticos naturales, sobre todo hechos a base de productos de unas colmenas, que se encuentran en la zona toledana del parque nacional de Cabañeros. Ana María Mejías reconocía que en este enclave privilegiado de Toledo hay una gran afluencia de gente, que está muy  contenta con los productos. ¿Lo más vendido? Cremas faciales, leches corporales o jabones artesanos. También  tienen mucha demanda los lotes con crema facial, crema de manos y protector labial con propolio.

El mercadillo se inició el pasado día 29 y estará en Zocodover hasta las navidades.