El juzgado de Primera Instancia número 2 de Toledo ha decidido archivar la causa contra José Gutiérrez por un presunto delito de fraude a la Administración Pública por las compras masivas de bombillas, fluorescentes y otro tipo de productos de limpieza por un importe de 300.000 euros durante su etapa de responsable económico de la Diputación Provincial, en la anterior legislatura. El secretario general del PSOE talaverano fue imputado en octubre de 2013 después de la denuncia del equipo de Gobierno de la Diputación, entre los que se encuentra el actual alcalde de Talavera, Jaime Ramos, y fue a declarar en diciembre de ese mismo año.

Gutiérrez informó ayer de la noticia apenas una hora después de conocer el auto judicial, y lo hizo acompañado por el presidente local del PSOE y candidato a la Alcaldía, Javier Corrochano; y los concejales Carlos Gil y Flora Bellón, «quienes me acompañaron  también hace dos años cuando se conoció la imputación». En sus palabras, el también portavoz del Grupo Municipal Socialista en el Ayuntamiento recordó que hace tan sólo unas semanas el Ministerio Fiscal ya solicitó el sobreseimiento de la causa por no encontrar delito en los hechos denunciados e insistió en la «persecución política» a la que se ha visto sometido, indicó, por parte del PP por ser el secretario general de los socialistas talaveranos.

Así, tras insistir en que estaba «tranquilo como el primer día», destacó la «profesionalidad» de los «excelentes» trabajadores que tiene la institución provincial que también se vieron implicados en el caso. «Hoy se demuestra que todo lo que se hizo fue legal y no hubo ninguna irregularidad ni ilegalidad». Con ello, explicó que sus cuentas «están totalmente limpias, se han revisado por tierra, mar y aire» y en breve se publicarán en la web del Ayuntamiento, lo que aprovechó para instar al equipo de Gobierno a que haga lo mismo «ya que tanto hablan de transparencia». Asimismo, recuerda que fue un error lo que se publicó «a bombo y platillo», donde se decía que había 50.000 euros en sus cuentas sin justificar. «Fue un error y lo dejo ahí».

La resolución de la causa llega poco después de que el Partido Socialista en la ciudad eligiera a Javier Corrochano como candidato a la Alcaldía, ya que Gutiérrez decidió no presentarse debido a la imputación aún vigente. Ayer, preguntado por los medios ante la tardanza del auto, aseguró que «nunca es tarde si la dicha es buena» y confirmó a Corrochano como un candidato «inmejorable, el mejor para defender Talavera, un talaverano de pro; es el único candidato posible para cambiar el rumbo de esta ciudad».

Con esas palabras volvió a ‘bajarse del carro’ para liderar la candidatura socialista al Ayuntamiento, algo que días antes confirmó que sí haría si esta resolución hubiera llegado antes, y aseguró que decidirá en los próximos días si finalmente acepta la propuesta del cabeza de lista de formar parte del listado como número tres, corriendo un lugar la posición de los hombres al ser una lista en formato cremallera. En este sentido, Corrochano respetará el tiempo que ha pedido Gutiérrez para decidirse «tras hablar con la familia y el partido, pero estoy seguro de que será una respuesta positiva», para la que además ya cuentan con la aprobación de la asamblea local.

El presidente del PSOE en Talavera definió a Gutiérrez como una persona «honesta, trabajadora y con las cuentas nítidas» y le felicitó por la resolución de un caso «que ha generado muchos quebraderos de cabeza en su familia y en la familia socialista de Talavera».

En cuanto a la reacción que esto tendrá en las filas populares, Gutiérrez explicó que ahora «llegará el momento del pataleo, intentarán mantenerlo vivo pero se ha demostrado que todo fue legal».

Investigación. El escándalo de las bolsas de basura de la Diputación saltó en abril de 2013 cuando el PP tuvo conocimiento de una reclamación de una deuda de 90.000 euros por parte de una empresa que desconocían, y se descubrió que se había invertido una cantidad cercana a los 300.000 euros en suministros que se encontraban en un almacén de la institución sin utilizar. En concreto, se encontraron más de 39.000 bolsas de basura y 5.600 tubos fluorescentes, entre otros. En la investigación interna se desveló además que se habían pagado unos precios muy superiores a los de mercado.

Los resultados se pusieron en conocimiento de la Fiscalía y posteriormente el equipo de Gobierno de la Diputación decidió denunciar el 26 de abril de 2013 en los juzgados de Instrucción de Toledo.