La Organización Impulsora de Discapacitados (OID) ha mostrado sus satisfacción ante la resolución del Juzgado de lo Penal número 1 de Toledo, que ha archivado una denuncia interpuesta en el año 1996 contra la propia OID por la ONCE y por la Asociación para el Estudio y la Defensa del Régimen Legal del Juego. Según informó  ayer en nota de prensa el citado colectivo, los tribunales han optado por archivar la causa haciendo suyos los criterios fijados por la Audiencia Nacional, que establece que «no existe delito de estafa, contrabando ni delito contra la Hacienda Pública» en los sorteos que lleva a cabo la OID.

Para la agrupación que preside Dionisio González esta resolución judicial supone una victoria «especialmente dulce», ya que ha sido dictada por un juzgado de Toledo, provincia en la que la OID lleva fuertemente arraigada desde el inicio de su actividad y a la que trasladó su domicilio social y su sede central, dando empleo a 300 personas sólo en Toledo, y más de 3.500 personas en toda España. Sobre este punto, hay que recordar que la sede central de la organización está en el polígono de Torrehierro de Talavera.

Desde la OID también resaltaron que la Audiencia Nacional ha archivado múltiples casos de denuncias de la ONCE y, al mismo tiempo, indicaron que pedirán daños y perjuicios al Estado y a la Organización Nacional de Ciegos.