Inés Sandoval, viceportavoz del Gobierno municipal, no parece contenta con el resultado de la reunión mantenida por el presidente de España, Pedro Sánchez, con el de Valencia, Ximo Puig, en la que acordaron que el Trasvase no se toca. La concejal toledana afirma que para el PSOE local sacar el agua del Tajo para dársela al Segura «es un atentado medioambiental» contra el río. «Nuestra postura no ha variado un ápice, somos absolutamente contrarios al trasvase», reitera.

Para Sandoval es importante conseguir que el Tajo traiga «un caudal ecológico real» y subraya que el trasvase produce un detrimento en el desarrollo económico de los municipios ribereños.

Como lecturas positivas señala que «hay alternativas como las desaladoras» y también asegura que «se está valorando ampliar el mínimo (no) trasvasable». Bajo su punto de vista es positiva cualquier medida que endurezca las condiciones exigidas para autorizar que el agua salga de su cauce natural. «Ojalá aumente hasta tal cantidad que podamos decir que el trasvase no es posible», indica.

Al mismo tiempo señala que el Ayuntamiento, con su alcaldesa al frente, y la Junta regional, con el presidente, tienen «contacto permanente con el Gobierno de España» sobre este asunto.

En su opinión «tenemos que ir todos a una» sin que los partidos «titubeen» con el fin de «hacerse oír en Madrid». En este sentido no ve que el el PP ni Ciudadanos se pongan en contra del trasvase y cuando le recuerdan que el PSOE nacional tampoco lo está indica que ese no es su negociado y no le interesa comentarlo, ella se ciñe a lo municipal.

Por otro lado, aunque le «consta» que Tolón hace un defensa del Tajo cada vez que puede, desconoce lo que responden a la alcaldesa en la Ejecutiva socialista.

traición. Desde el PP, por contra, tienen claro que lo del trasvase es «una traición a Tolón» por parte de Sánchez. Sonsoles Garrido, concejal del PP, afirma que su partido siempre ha estado en la defensa del Tajo y recuerda que los socialistas ahora pueden modificar la ley del trasvase lo mismo que hicieron nada más llegar Sánchez a la Moncloa con la prisión permanente revisable. Es decir, si no lo hace es porque no tiene voluntad o ha tomado partido por los levantinos.