Si al final el proyecto del aparcamiento de Santa Teresa va a consistir en «un lavado de cara, echar tierra y zahorra», el PP se pregunta «si cuesta 400.000 euros, como viene establecido en el contrato de la ORA». De ahí que haya solicitado al Ayuntamiento la convocatoria de una Comisión de Urbanismo extraordinaria, con carácter de urgencia, en la que se dé cuenta de las obras del aparcamiento.
Porque el Grupo Municipal, explica la concejal Sonsoles Garrido, ha podido comprobar que no se ha hecho público el proyecto, ni se ha colgado de la web municipal, como sí ocurre con el resto de obras que se ejecutan en la ciudad. Todo ello, después de que el PP haya preguntado en varias ocasiones (al menos dos veces por escrito y otras dos en las últimas comisiones de Urbanismo) si hay convenio con Defensa que permita el desarrollo de las obras. Porque, apunta Garrido, tras la anulación del POM de 2007, cabe la duda de si el convenio con Defensa también se ha anulado.
Ante estas peticiones de información, advierte la edil, «sólo encontramos contradicciones y declaraciones huecas de contenido de los distintos concejales del equipo de Gobierno». A todo eso, la alcaldesa de Toledo, Milagros Tolón, ha advertido que «no hay problema de nada», dado que el pasado 1 de octubre el secretario de Estado de Defensa le dio el visto bueno «a todo». Garrido se pregunta a qué se ha dado el visto bueno, y por qué se ha informado un mes después, después de toda las preguntas populares.
Le cabe la duda al PP de que el proyecto que se está ejecutando sea el que han supervisado la Junta de Comunidades y la Real Fundación Toledo, «o como es habitual en Tolón, está improvisando de nuevo». Porque, hasta ahora, el principal partido de la oposición sólo tiene conocimiento de lo que está ocurriendo en el aparcamiento por goteo de los medios de comunicación o por visión directa.
Cara zahorra. Lo cierto es que lo que se puede ver, hasta ahora, es que se está echando tierra en el aparcamiento. Además, el sábado se pudo saber que el asfalto propuesto se iba a sustituir por zahorra y unas planchas, al estilo del aparcamiento del Circo Romano, porque al parecer, así lo habían pedido la Real Fundación y la Dirección General de Patrimonio. También se ha conocido por este diario que no se podrán plantar árboles, para que las raíces no afecten a las ruinas.
No habrá, por lo tanto, alcorques. La duda del PP es si se podrán poner farolas, para que el aparcamiento sea iluminado. Porque serán necesarias zanjas para su instalación. «Pero todos esos datos son desconocidos». Se pregunta Garrido, por lo tanto, si el aparcamiento, sin árboles, ni farolas, costará 400.000 euros y pide transparencia.