Maduro reduce la jornada laboral de los funcionarios a lunes y martes

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El programa de ahorro energético se extrema obligando al sector público a trabajar dos días, aunque previsiblemente mantendrá el salario

 
 
La grave crisis energética que está atravesando Venezuela por los estragos de la sequía ya ha obligado al Gobierno de Nicolás Maduro a tomar varias medidas de ahorro, como el racionamiento de suministro eléctrico durante cuatro horas en el 75 por ciento del país o el decreto de los viernes como día no laborable para el sector público durante los meses de abril y mayo. Ayer, los funcionarios fueron nuevamente los afectados por un nuevo ajuste del Ejecutivo, que anunció que, al menos durante las próximas dos semanas, los empleados de la Administración solamente trabajarán los lunes y los martes.
«Los miércoles, jueves y viernes no se laborará en el sector público, a excepción de aquellas tareas que son fundamentales y necesarias», argumentó el vicepresidente, Aristóbulo Istúriz, quien informó de que se trata de un «esfuerzo para reducir el consumo de energía eléctrica».
Además, también indicó que los viernes tampoco serán laborables «para los centros educativos de los niveles inicial, medio y básico», lo que afectará a los colegios de buena parte de la nación.
Maduro confirmó las palabras de su número dos y anunció que solicitará ayuda internacional para solventar la crisis que atraviesa el Estado caribeño y que le está obligando a tomar las medidas de racionamiento.
Según explicó, Venezuela lleva «dos años de sequía extrema» -según los expertos, la más dura en las últimas cuatro décadas-, y aseguró que los planes especiales impulsados por su Gabinete para promover el uso racional del agua y de la energía «han permitido frenar el descenso de los niveles en el embalse de Guri», que provee el 63 por ciento de la electricidad del país sudamericano.
Sin embargo, y pese a la normativa impuesta sobre el descanso obligado del sector público -cuyo sueldo, previsiblemente, se mantendrá, a pesar de ver reducida su jornada-, el presidente de la Asamblea Nacional, el opositor Henry Ramos Allup, aclaró que el Parlamento trabajará «de lunes a viernes», obviando «el decreto vagancia» emitido por el Gobierno.
 
Disturbios por los cortes. Por otro lado, una serie de acciones vandálicas se registraron en varias ciudades de Venezuela, dentro de las protestas por los cortes de luz y agua y por la escasez de alimentos.
El gobernador del estado de Zulia, en el oeste, Francisco Arias, afirmó que se produjeron «acciones desestabilizadoras» en la localidad de Maracaibo que «son disturbios provocados» por personas que se quejaban del racionamiento impuesto por el Ejecutivo.
Asimismo, en las céntricas regiones de Aragua y Vargas, en los municipios de Maracay y La Guaira, también se informó de cortes de calles y quema de neumáticos.
«Sabemos que grupos de extrema derecha financian estos actos, quienes paguen por estas acciones no puede tener aceptación, ni llegar al poder», manifestó Arias.
El gobernador apuntó, además, que «estos hechos» violentos «no harán que llueva en las cuencas de los ríos, afrontamos un fenómeno natural, seguro estamos que las lluvias llegarán al país», al tiempo que anunció ayudas a los comerciantes afectados.
 El secretario de Seguridad y Orden Público de la Gobernación del Zulia, Biagio Parisi, relató: «Reforzamos patrullaje en el casco central y comercios. Más de 25 personas detenidas por saqueos en Maracaibo».
Asimismo, hizo una llamada «a la calma» y garantizó que el organismo que dirige asegura «la tranquilidad del Zulia», al tiempo que pidió a los ciudadanos denunciar los actos vandálicos.
De acuerdo con el diario regional zuliano Panorama, los disturbios se iniciaron con la protesta del pasado lunes por los cortes eléctricos, «que superaban las 24 horas», situación que se mantuvo el martes en varios sectores.
Ante esta situación, Maduro avisó de que se instalará una «Comisión Presidencial en el Zulia» para atender las consecuencias de la sequía, al tiempo que aseguró que no permitirá «guarimbas».