La recaudación de impuestos municipales va a terminar el año 1,7 millones «por encima de las previsiones». Cuando se esperaba una caída de ingresos por los ajustes a los que ha sido sometido el IBI a través de los coeficientes reductores del valor catastral resulta que el Ayuntamiento, a fecho 30 de septiembre, ya había superado la cantidad presupuestada y según las proyecciones acabará el año ganando más dinero que el pasado ejercicio.

Según figura en el informe de seguimiento del plan de ajuste económico la liquidación por IBI de 2013 indica que el Ayuntamiento consiguió una recaudación efectiva de IBI de 28,42 millones de euros mientras que este año en curso, al terminar el tercer trimestre, ya llevaba metidos en la caja 28,21 millones y se espera que al final de año alcanzar los 28,63 millones. Es decir, va a ganar 210.530 euros por encima de lo obtenido por el impuesto de bienes inmuebles hace un año.

El impuesto sobre el valor de los terrenos urbanos (plusvalías) también se comporta a favor del Ayuntamiento, en este caso de manera espectacular ya que en septiembre estaba casi 1,8 millones por encima de la liquidación de 2013. El ajuste en el recibo de la tasa de basura sí que ha funcionado a la baja y se estima una reducción de 267.040 euros respecto al ejercicio anterior.

Donde también se ha fallado es en la previsión de ingresos por la nueva inspección tributaria. Para todo el año se contaba con recaudar 1,9 millones de euros extraordinarios pero la empresa encargada del trabajo sólo se ve capaz de conseguir 100.000 euros del impuesto de construcciones.

A pesar de todo se cumple la estabilidad presupuestaria, el nivel de deuda y el techo de gasto, y existe remanente de tesorería positivo. La deuda comercial reconocida con proveedores al finalizar septiembre era de 3,1 millones de euros.

emv en desequilibrio. Lo peor sigue estando en la Empresa Municipal de la Vivienda donde los cinco últimos años, excepto 2012, presenta «desequilibrios financieros por los efectos de la fuerte recesión económica nacional y la inexistencia de actividad inmobiliaria». Lo pero de todo es que «las cuentas anuales de 2013 presentan un fuerte déficit de 4 millones de euros».

La EMV no tiene recursos procedentes de la gestión ordinaria (promoción de viviendas) ni de la extraordinaria (venta de suelo) de manera que no ha sido capaz de hacer frente al vencimiento de 3,38 millones de deuda hipotecaria. Para este año ha modificado a la baja sus previsiones de ingresos pero el equilibrio depende de incautar las garantías constituidas por contratistas de obras y la realización de las enajenaciones inmobiliarias previstas.

El interventor recomienda que la EMV adopte un plan de reequilibrio y saneamiento financiero para refinanciar su deuda. También recuerda que está pendiente de aprobar por el Ministerio de Hacienda la convalidación de las operaciones de crédito que ha sido solicitado por el Ayuntamiento.

Son seis operaciones de crédito bancario a largo plazo, por valor total superior a los 26 millones de euros, suscritas «indebidamente» entre los años 2009 y 2012 cuando las cuentas municipales daban ahorro neto negativo. La explicación del asunto es la confirmación que hace la ley de estabilidad de las administraciones de que la EMV es sector público y como tal está obligada a cumplir las mismas normas de funcionamiento. Además, el Ayuntamiento, como dueño absoluto de la empresa, es responsable de que las cuentas consolidadas cumplan de igual manera el equilibrio.