La anunciada vuelta de Partido de Resina a Madrid fechada en un inicio para San Isidro, se vio aplazada por lluvias. Con buena acierto, la empresa optó por programarla para este casi cierre de temporada; la festividad de la Virgen del Pilar y Día de la Hispanidad. Era pretexto idóneo para la vuelta de estos toros al coso de venteño. Para la ocasión una eterna joven de toreros que han ilusionado a Madrid por méritos propios, lástima que esos méritos no sé hayan materializado en triunfo, pues tanto Rubén pinar como Gómez del Pilar a pesar de no triunfar en forma de orejas, ven reforzado su caché en la primera plaza del mundo de cara a la próxima temporada.
Cruzaba Gómez del Pilar el albero madrileño. Frente a la puerta de toriles, en su soledad y mandando en su “hambre”, se hincó de hinojos tras calarse la montera frente a la puerta. Libró el toro se quedaba debajo saludar darlo por navarras cuajo una media que aburro echaba un saludo que había cagado en los pedidos ya con la montera en la mano pidió permiso al ussia y volvió a los medios para recibir herencia de gratitud y cariño, siendo templado y armoníco en e brindis de este tercero de la tarde se fue bajo la puerta de Madrid y allí comenzó a armar las embestidas de El Guapo cara de no que lucía el hierro de los míticos Pablo Romero fue sobando las en vestidas hasta que consiguió meterlo en el canasto poco a poco Gómez del Pilar fue cuando una faena de mando y de pulse o en los muletas os fue tomando vuelo consiguiendo que transmite sea todos aquellos que celebra van las festividad de la Hispanidad en el coso madrileño.
Paró, templo y mando el toledano en las embestidas de este animal con el mítico hierro de pablorromero, ahora partido de resina. Tanto fue así que tras una serie de manoletinas que en cogieron el corazón de Madrid acariciaba prácticamente no he Gómez del Pilar. Se tiró a matar con rectitud y se oyó “estás muerto” justo antes de en el embroque echarle el toro la cara arriba y solamente señalar un pinchazo. Si fue entera la del segundo invite, que tras una muerte espectacular, el público pidió con fuerza la oreja petición no atendida por el presidente y que dejó todo en una amorosa vuelta al ruedo, esas que antiguamente Madrid valían y mucho
Con la misma responsabilidad sobre sus hombros, capitaneando y sabiendo que su destino está en su muleta y su capote, volvió a cruzar el platillo madrileño para recibir al que iba a salir en 5º turno de la tarde. No pudo ser. Se frenó justo antes de llegar a la jurisdicción de la portada yo la por lo que no Javi mente hubo de levantarse para pasar los dos veces que pronto canto la gallina y eso que no estábamos en el ocaso fue complicado durante toda la lidia y en la muleta se convirtió en un corre calle del espada de atrás del burel por todo el ruedo. Por mucho que se haga, no pudo obtener más allá de dos muletazos frente a la puerta de chiqueros.
Había abierto la tarde un precioso animal de hierro de Partido de Resina. Muy aplaudido de salida, tras el respetuoso minuto de silencio memoria de las víctimas de las inundaciones de Mallorca y un respetuoso Himno Nacional, el tobarreño Rubén Pinar se propuso lanzar la moneda tanto fue así que en el tercio de muleta, con todo resuelto y nada por resolver, ante un animal que pasaba mirando corto de viaje y que apenas tenía transmisión; en un feo derrote resultó corneado en dos trayectorias (20 y 25 centímetros) que no impidieron, a pesar del pronóstico muy grave, que terminan se de dar lidia y muerte. Tiró de garra hasta llegar a matar el animal, dejando una notable estocada entera, quién sabe si de no haber pinchado, hubiera podido a ver enfilado el camino a la enfermería con una oreja en su esportón.
Completaba la terna el madrileño Javier Cortés. A la las primeras de cambio se vio con la papeleta de estoquear 3 animales en esta misma tarde. Atrás quedaba la cogida de Rubén Pinar, cuando saltó al arena el segundo ante el que poco pudo hacer Cortés más allá de andar digno intentar lidiar sobre las piernas y salir con presteza del envite. Se corrió turno y en cuarto lugar salió el que estaba en he quedado en 5º, un alto y vareado animal de José Luis Pereda que remendaba el encierro titular. Demasiado cornalón, como demasiado vacío fue su juego. Nada de historia en este cuarto capítulo más allá de la disposición del torero de Getafe. Por último salió en 6º lugar del que estaba reseñado para haber hecho cuarto de la tarde y segundo del lote de Rubén Pinar. Decidió Cortés que fuese el que cerrar se el festejo; salió y fue arrastrado; entre medias busco sembrar pánico y generar complicaciones más allá de dos apuntes en el capote. No fue la tarde de los toros guapos de Pablo Romero; donde la fachada apuntaba pero el interior no contenía; porque no es oro todo lo que reluce.