El folclore local y de Asturias encandila al público en el Festival del Mayo Miguelete

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La letra y música de los tradicionales Mayos migueletes inundaron este fin de semana las calles de Miguel Esteban para cumplir con una de las costumbres manchegas más arraigadas. Niños y mayores pudieron disfrutar del cántico de los Mayos y del Festival del Mayo Miguelete, dos citas que fueron muy bien acogidas, informa el Ayuntamiento.

Más de 300 personas asistieron al Festival del Mayo organizado por la Asociación Folklórica ‘Danzas y costumbres’ en colaboración con el Ayuntamiento. El grupo ‘La alegría de Porceyo’ de Gijón (Asturias) hizo homenaje a su nombre y ofreció una actuación muy alegre, con ritmos muy variados del folclore asturiano que hicieron disfrutar al público. El espectáculo se completó con el escanciado y degustación de sidra, además del canto de ‘Asturias, patria querida’.   

Por su parte, la asociación folklórica ‘Danzas y costumbres’ de Miguel Esteban, ofreció un amplio y colorido repertorio de jotas, seguidillas, rondeñas y fandangos, a cargo del grupo infantil, el grupo de madres y el grupo de adultos. En todo momento, los danzantes estuvieron acompañados en el escenario por Don Quijote, Dulcinea y Sancho Panza, como homenaje al IV Centenario de la Muerte de Cervantes, que se conmemora este año.  

En el acto, también se entregó el título de Mayero de Honor a Juan Lara, uno de los fundadores del primer grupo de folklore de Miguel Esteban, por su trayectoria musical.

Antes del Festival del Mayo, los dos grupos folklóricos visitaron la ermita de Nuestra Señora del Socorro, donde cantaron los Mayos a la patrona y le hicieron entrega de un ramo de flores.

Durante la madrugada del 29 al 30 , la charanga ‘Idos de tono’, junto a diferentes voluntarios, fueron cantando los Mayos por medio centenar de hogares migueletes.  

Hasta las cinco de la madrugada, músicos y cantantes recorrieron las calles entonando el típico cántico que, tal y como manda la tradición, repitieron dos días después, ante la mirada de muchas personas que quisieron presenciarlo en primera persona asomándose a puertas y ventanas.