El portavoz del Grupo Municipal de Ganemos y presidente del Distrito del Casco, Javier Mateo, ha denunciado que «no son admisibles» las declaraciones del gerente del Consorcio, Manuel Santolaya, diciendo que lo importante es la rehabilitación, y da igual después la utilización de los inmuebles rehabilitados con dinero público. «Porque el Consorcio no se ocupa sólo de la conservación del patrimonio, se ocupa también, y fundamentalmente, de conseguir que el barrio del Casco histórico sea agradable para que las familias toledanas puedan vivir en él», explicó. De esa forma, las declaraciones de Santolaya «van en contra del espíritu del Consorcio».

Así valoraba Mateo la respuesta del responsable del Consorcio tras la polémica del uso como apartamento turístico de un edificio rehabilitado con sus subvenciones en Aljibillos. El edil se mostró convencido de que el convenio con la propiedad será legal, «pero se deben dar explicaciones, porque sí nos preocupa a qué se dediquen los edificios».

El edil se mostró convencido de que el Consorcio es una herramienta fundamental para la ciudad, la herramienta indispensable para la conservación del patrimonio y la rehabilitación de vivienda en el Casco, «cuyo fin último debe seguir siendo dar vida al Casco como barrio, como lugar de residencia para vecinos». De ahí que no se pueda permitir dar otra imagen y ha de dotarse se los mecanismos necesarios de vigilancia y de inspección «para que no se perviertan sus fines».

Por ello, el portavoz de Ganemos, como miembro del Consejo de Administración del Consorcio, va a pedir que en la próxima reunión se presente un informe detallado y claro de la situación de estas viviendas, así como de los mecanismos que tiene para el control del cumplimiento de las obligaciones de los beneficiarios. Porque sin conocer el convenio, no se puede saber si la propiedad ha cumplido o debe devolver las ayudas. Curiosamente, en declaraciones a la prensa, Santolaya siempre ha hablado de seis viviendas, habrá que ver si es lo recogido por escrito. Además, Mateo pedirá información sobre las subvenciones otorgadas por convenio en los últimos cinco años, y que se compruebe el cumplimiento efectivo de las condiciones.

Doble rasero. Las ayudas a la rehabilitación, explicó el concejal, están perfectamente reguladas en las ordenanzas para que los inmuebles se dediquen a vivienda y sólo hace falta voluntad del Consorcio para controlar que así sea. El problema es que hay otra vía para acceder a ayudas del Consorcio, los convenios.

La ordenanza que regula las ayudas del Consorcio a la rehabilitación de vivienda recoge que las viviendas deberán destinarse a residencia habitual y permanente y ocuparse en el plazo máximo de seis meses. La concesión de la ayuda definitiva quedará condicionada a la ocupación de las viviendas. Además, los inmuebles deberán estar ocupados de forma habitual y permanente durante los cinco siguientes años.