La ciudad acoge este fin de semana el LXVIII Congreso de la Asociación Española de Floristas (Aefi) que, bajo el lema ‘Las flores, instrumento de paz y tolerancia’, apuesta por ser «lugar de encuentro» en el que analizar, debatir y compartir los distintos aspectos de un sector que «necesita de un aprendizaje constante y de una renovación permanente de nuestros negocios». La presidenta nacional del colectivo, Esther Domínguez, apreció la importancia de orquestar estos encuentros para «ahondar en la situación del sector y para planificar nuevos horizontes y planes de negocio». A la cita acudirán cerca de 150 profesionales.

Junto a ella, y como representante del gremio toledano, Déborah Rodilla agradeció la elección de Toledo para esta celebración profesional destacando la relevancia de una cita que cuenta con «los primeros espadas del mundo floral» y que dejará un rastro de flores «por donde pasemos». Así, y por tratarse de un congreso abierto a la ciudadanía para que «sepan lo que somos capaces de hacer», explicó que además de la exhibición decorativa instalada en el Palacio de Benacazón -sede del encuentro-, las flores también se mostrarán en el hotel Alfonso VI, en la Hacienda del Cardenal y, por supuesto, en la Capilla de la Virgen del Sagrario de la Catedral. Espacio en el que se celebrará, este viernes a las 10,00 horas, una misa y ofrenda floral. El programa se puede consultar en http://www.aefi.es/Documentos/PDFBlog/Programa.pdf.