redacción / toledo

El colegio de Segurilla es uno de los seis comedores escolares nuevos con los que arrancaba el curso escolar 2018/2019 en la provincia de Toledo. Sin embargo, se han presentado imprevistos en la instalación del mobiliario por pequeñas deficiencias en la red de fontanería que, a fecha de hoy, confirmaban tanto desde la Junta como desde el Ayuntamiento, ya están resueltas.

Así las cosas, la sensación de intranquilidad entre la comunidad de padres que necesitan hacer uso de este servicio se puede ver disipada a lo largo de la próxima semana, porque lo que sí está claro es que «el comedor se va a poner en marcha con toda seguridad la próxima semana», certificaba el director provincial de Educación, José Manuel Almeida, que recordaba que la empresa instaladora está montando todos los nuevos comedores y se presentan imprevistos y retrasos en suministros de materiales imponderables.

«Lo importante es que por fin dispondremos de un servicio de comedor escolar y quizá esperar una semana más no debería poner el acento dramático a la situación», apreciaba por su parte el alcalde. Dice Pablo Barroso que si fuera necesario de forma inexcusable abrir el aula matinal con recursos municipales -como lo han hecho años atrás- no dudarían en hacerlo, pero apela a la paciencia y reconoce al Gobierno regional su predisposición para hacer lo posible para que este recurso sea una realidad más  pronto que tarde.

En cualquier caso, matiza el alcalde, que agredece a la Junta más allá de los colores políticos -él forma parte de las listas del PP- haber sido elegidos para la instalación de este recurso tan importante para la conciliación laboral como para aquellos padres con escasos recursos que serán becados para que sus hijos puedan disfrutar de este servicio, que esta semana ha sido especial dado que la localidad se encuentra en fiestas y ayer por ejemplo era fiesta local.

Así las cosas, y aunque el Ayuntamiento no va a dejar de estar vigilante, al igual que lo están desde el centro escolar, para que la semana que viene se cumpla con lo prometido, el alcalde apela a la paciencia y a entender los imprevistos «materialmente imposibles de afrontar». 

Porque, coincide con el director provincial de Educación, José Manuel Almeida, que se sabe cuándo empieza una obra pero no cuando acaba concretamente.

En el comedor de Segurilla se atenderá a unos 35 alumnos con un servicio de cátering que ya está preparado para iniciar su trabajo una vez que el Gobierno regional les comunique que tienen a su disposición y en regla las  instalaciones. «La empresa sólo espera que les confirmemos que tiene todas las instalaciones para poder llevar la comida», señalaba Almeida.

Los otros cinco centros educativos que abren este año comedor escolar son los de los municipios de Alameda de la Sagra, Camuñas, Ciruelos, Noez e Illescas (CEIP nº 6) que junto al de Segurilla atenderán a unos 220 alumnos.

En la provincia de Toledo hay  de 148 comedores escolares que prestan este servicio a unos 11.000 alumnos.

Camuñas. Y mientras se solucionan los últimos detalles de los nuevos comedores como el de Segurilla, los vecinos de Camuñas tendrán que esperar hasta enero, prevén desde el Gobierno regional, a poder contar con este servicio.

Explica el director provincial de Educación que el acuerdo con el Ayuntamiento pasaba por que el Consistorio realizara la obra para habilitar un espacio que albergase este servicio mientras la Junta se encargaba del mobiliario y servicio de comidas. 

Así las cosas, el Ayuntamiento aún no ha concluido estos trabajos puesto que estaba pendiente de recibir las ayudas a cargo de la línea de de Expresiones de Interés que, confirmaba Almeida, el jueves publicó la lista definitiva de beneficiados entre los que está este proyecto de Camuñas.

«Ahora han de ponerse en marcha para concluir estas obras y esperamos que para enero se pueda iniciar la puesta en marcha del comedor», aventuraba el director provincial de Educación, que resaltaba que pese a los retrasos y problemas de logística y suministros, «lo que debemos valorar es que vamos a poner seis comedores nuevos en marcha en los que se dará servicio a unos 220 alumnos y que es un motivo de satisfacción para la provincia».