Un total de cuatro personas han resultado heridas leves en un accidente de tráfico ocurrido sobre las 8:30 horas de la mañana de ayer. Se trata de los ocupantes de un único vehículo que circulaba en la mañana del primer día del año por la N-400 en dirección Ocaña, justo a la altura de la rotonda con paso subterráneo que da acceso al centro comercial Luz del Tajo.

El conductor del vehículo siniestrado, al parecer, perdió el control del coche e impactó contra la pared de hormigón del paso subterráneo, provocando el giro del turismo y que éste quedara parado justo en el medio de los dos carriles de la vía.

Los agentes de la Policía Local de Toledo fueron los primeros en llegar al lugar y prestar ayuda a los accidentados. Procedieron a cortar el tráfico a la espera de la llegada de una patrulla de la Guardia Civil de tráfico, toda vez que la vía es competencia de la benemérita al ser un tramo interurbano no recepcionado por el Ayuntamiento de Toledo.

Los agentes de la Guardia Civil practicaron la pertinente prueba de alcoholemia al conductor del vehículo, resultando negativo tanto en alcohol como en drogas, por lo que la hipótesis del descuido o la perdida del control cobra fuerza a expensas de conocer los resultados del informe.

Los heridos fueron atendidos en el lugar, presentando heridas de carácter leve.