El CD Toledo visita el domingo al Socuéllamos (12:00 horas) con la idea de seguir los pasos del Marchamalo, el único equipo que ha podido tumbar al cuadro azulón en lo que va de temporada. Para el técnico verde, Manu Calleja, será un encuentro muy especial porque, además de medirse a su exequipo, sigue afincado en la localidad ciudadrealeña. De ahí que de su boca no salgan más que piropos para definir a los de Mario Simón.

«Estamos hablando de un equipo de Segunda B en Tercera y que tiene unos números que no son propios de la categoría», reconoce. Además, resalta que van a visitar un campo, el Paquito Giménez, que es «muy especial», al que «hay que adaptarse rápido». El cántabro sabe que se van a encontrar «mucho balón parado» y a un rival «que te puede hacer gol de cualquier manera, incluso de un saque de banda».

Por todo esto, Calleja repite en varias ocasiones que no es encuentro que permita «que te puedas desconectar». Y es que, «te sacan rendimiento de todo y no podemos cometer errores», añade. Desde su punto de vista, el reto del Toledo será «ir a ganar» y encuentra varios motivos para ello: «Es el rival al que probablemente más conozcamos pero también ante el que los jugadores irán más motivados, ya que tienen ganas de reivindicarse y de sacarse la espina». Asimismo, el entrenador confesó que le ha dicho a sus futbolistas que «están capacitados para vencer» y que «mucho pueden ser titulares en el Socuéllamos».

Tras el partido de Copa Federación en El Prado frente al CF Talavera, el entrenador se espera muchos cambios, sobre todo en ataque, ya que «cuentan con mucha variedad de jugadores». Y aprovechó de nuevo para decir que tiene muchos amigos en el club socuellamino y que el año pasado el fútbol les quitó un ascenso: «El Socuéllamos tiene que estar en Segunda B».

Del mismo modo, al preparador verde se le preguntó por el triunfo de La Roda en el partido aplazado ante el Ibañés, un resultado que pone al Toledo a siete puntos de la cuarta plaza. Calleja insiste en que se deben olvidar de objetivos leganos para centrarse en lo inmediato. «Cuando estuvimos cerca, nos generó una ansiedad indebida», explica.

En cuanto a efectivos, la escuadra capitalina tiene a todos los jugadores disponibles, ya que regresan Esparza y Germán. De hecho, según deslizó Calleja, parece que el mexicano tiene asegurado un puesto en el centro de la defensa. Y es que, no quiso asegurarlo, pero sí considerar que es un partido «para alguien alto y fuerte y que se adapte mejor al juego aéreo para controlar a Megías y Belencoso».