Los juzgados de la provincia han vuelto a dejar una amplia muestra de su actividad a lo largo de 2012 gracias al informe que acaba de publicar el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ). En general, la mayor parte de los órganos experimentó el año pasado un importante crecimiento en comparación con 2011, pero en la jurisdicción de Menores ocurrió lo contrario por una rebaja de los índices de delincuencia juvenil. Por tanto, el juzgado de Menores registró 286 asuntos penales a lo largo de 2012, 27 menos en comparación con el año anterior.

Además, este órgano trabaja con agilidad aunque necesita más recursos tal y como ha indicado en más de una ocasión el Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha en su memoria anual. Si bien, los datos del  CGPJ confirman una menor saturación en comparación con otras jurisdicciones porque el juzgado de Menores resolvió 336 asuntos penales a lo largo del año 2012, un 29,3% menos que en 2011.

El informe también destaca la existencia de 312 expedientes en trámite al principio de año y avala el buen trabajo de la plantilla porque a finales del ejercicio había 262 asuntos en trámite, 50 menos si se toma como referencia el mismo periodo de 2011.

El Juzgado de Menores de Toledo, el único órgano dedicado a esta jurisdicción en toda la provincia, dictó 151 sentencias y 181 autos a lo largo del ejercicio. Si bien, llama la atención la bajada de resoluciones por autos porque en 2011 finalizaron de esta manera 316 asuntos penales.

La memoria de actividad del CGPJ ofrece una exhaustiva radiografía de la actividad judicial, aunque en este caso el documento no haya agrupado el número de asuntos en relación a los actos delictivos. Sin embargo, año tras año suelen repetirse los mismos patrones porque las lesiones, los robos con fuerza o con violencia, los daños y los delitos contra la salud pública suelen ser los más numerosos, aunque tampoco se pueden despreciar otros asuntos menos extendidos que preocupan significativamente en el ámbito judicial por su gravedad. Es lo que ocurre con los abusos sexuales, que se duplicaron en la provincia en 2011 a pesar de que no superaron la treintena, y las infracciones relacionadas con la violencia contra la mujer y en el ámbito familiar porque también han aumentado en los últimos ejercicios judiciales.

intensa actividad. Las cifras de pendencia en el juzgado de Menores no son tan significativas como en el resto de órganos judiciales de la provincia, pero una rápida lectura de las estadísticas de actividad refleja la escasez de plantilla en relación a la gran cantidad de asuntos que se tramitan cada año.

Además, cabe tener en cuenta que los asuntos de menores exigen trabajar en equipo, junto al psicólogo, el trabajador social, el educador y la administración correspondiente. Ygracias a la buena coordinación se consigue que el 80%de las sentencias sean de conformidad, aunque aún se eche en falta una mayor cultura de la mediación, un reto sobre el que se está trabajando para obtener buenos resultados en los próximos años.

Respecto a los medios, el juzgado de Menores lleva muchos años solicitando la creación de un centro de internamiento para jóvenes en la provincia de Toledo, una petición que cada año le llega a la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, pero aún no ha ofrecido respuesta aunque  es la competente en la materia. También se han hecho eco de esta antigua reivindicación la Fiscalía de Toledo y el Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha. La última solicitud la expuso en público el Fiscal Superior de Castilla-La Mancha, José Martínez Jiménez, hace año y medio al dar cuenta de la memoria anual de 2011 porque la región sólo dispone de dos centros de internamiento, uno en Ciudad Real y otro en Albacete, y la falta de recursos obliga a los menores a desplazarse a otras provincias cuando se acuerda esta medida.

La crisis económica y los ajustes presupuestarios marcan la agenda de las administraciones desde hace tiempo y habilitar un centro de menores no parece entrar en los planes de la Junta.