Onésimo Sánchez sabe que mañana en el campo de Urbieta, en Gernika, el CD Toledo va a tener que manejar (19:00 horas) otros aspectos más allá que su propuesta de fútbol. Por eso, el técnico ya ha pedido a sus futbolistas «un nivel alto en cuanto a ritmo y pelea» y, aunque le preocupa que su equipo muestre la identidad que le caracteriza, «lo demás es muy importante y tenemos que saber movernos». Por tanto, el tipo de rival y la superficie de césped sintético espera que les condicione «lo mínimo». En cualquier caso, para eso se ejercitarán en la jornada de hoy en el Anexo, «para acostumbrarnos al toque y al bote de balón, que no es igual; nos toca y nos tenemos que adaptar».
Aún así, el vallisoletano conoce al conjunto de Javi Luaces, al que ha visto en el primer encuentro liguero disputado en el campo del Arenas, y, a parte de las características de los conjuntos del norte de España, el Gernika «tiene dos o tres jugadores por dentro que quieren la pelota, así que manejamos la información para darles las cuatro o cinco pinceladas a nuestra gente», pero lo básico para él, insiste, «somos nosotros».
La derrota del pasado domingo contra el Barakaldo en casa puede haber generado una presión extra que el entrenador verde ya contaba con ella antes. Desde su punto de vista, «no fue el inicio idóneo», pero sí mantiene que «hubo cosas buenos porque a ratos fuimos mejores que ellos y el Toledo hizo méritos para adelantarse y no lo consiguió porque no tuvo fortuna».
Esto no le impidió detenerse en lo malo, algo que ha trabajado durante los últimos dudas. Su sensación es que «el penalti es muy dudoso, aunque no debimos ni llegar a esas dudas» y que «el segundo gol es un error garrafal que no se puede permitir, ya que en esta categoría si das ventaja acabas perdiendo». Es una jugada que como entrenador «me cabrea», dijo. Más aún cuando «es algo que tenemos trabajado y no hicimos los movimientos». De todas formas, el preparador de los capitalinos quiere dejar claro que nunca castiga por fallos puntuales sino «cuando detecto que hay compañero que lo está haciendo bien, siempre pensando en el once inicial más competitivo que se pueda sacar».
Incorporaciones. Tras la sesión de entrenamiento de ayer, Onésimo también habló de los refuerzos en los que trabaja el secretario técnico, Joaquín Sorribas. Las lesiones le impiden trabajar con garantías y, por eso, considera que «necesitamos ya a alguien más», a pesar de reconocer que cuenta «con una plantilla versátil». El técnico aclaró que lo que venga será para la parcela atacante y que, probablemente, sean dos si es que encajan dentro de los parámetros del club. Uno de ellos sería un extremo con cualidades para jugar por dentro, mientras que el CD Toledo también se halla detrás de un ‘9’, según el vallisoletano, «con características diferentes a lo que ya tenemos, más rápido, más móvil y con caídas a banda».