La Junta tiende la mano a Murcia y Valencia pero recurrirá los trasvases

S. GALA
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La consejera de Fomento, Elena de la Cruz, explicó ayer que lo que pretenden es «sentar jurisprudencia» porque en los últimos casos «el daño ya está hecho» y el agua trasvasada

La Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha quiere hacerse oír. Carece de voz en la Comisión Central de Explotación del acueducto Tajo-Segura y por ello acude a la fórmula de los recursos contra el trasvase para poner de manifiesto su oposición. Precisamente el Consejo de Gobierno daba ayer luz verde a los servicios jurídicos de la Junta para la presentación del recurso contra el trasvase aprobado el 27 de julio de 20 hm3 desde la cuenca del Tajo a la del Segura. La consejera de Fomento, Elena de la Cruz, explicaba ayer que el Ministerio tomó como dato el agua embalsada en los pantanos de cabecera Entrepeñas y Buendía con fecha 1 de julio, y en esa fecha la cantidad ascendía a 470 hm3. Sin embargo, apuntó que a la fecha de aprobación del trasvase la cantidad era de poco más de 420 hm3. «Teniendo en cuenta que cuando se realiza el trasvase, de la elevación del propio agua se pierde volumen, hay una evaporación de la misma, y además hay que desembalsar agua desde el pantano para la viabilidad del río; creemos que hay una vulneración de la lámina mínima que establece la Ley de Evaluación Ambiental con un umbral mínimo de 400 hm3 a partir del cual no se podía trasvasar», recalcó.

Este es uno de los argumentos que ha esgrimido la Agencia del Agua en la elaboración del recurso. En este punto, la consejera recordó que el Ministerio reconoció a través de un comunicado el 8 de marzo de 2014 que se había alcanzado un volumen de agua embalsada entre los dos pantanos de cabecera de 900 hm3 y por tanto de forma inmediata se establecía el umbral mínimo.

De la Cruz lamentó que el Ministerio de Agricultura haya seguido desembalsando agua bajo los 400 hm3, y la Junta cree que «cuando se aprobó el trasvase, se sabía que se iba a bajar de esa cantidad y que no se iba a poder realizar».

Asimismo, indicó que con este trasvase se están vulnerando otros fundamentos de derecho, porque se aprobó en lo que se denomina nivel 3, que es cuando el volumen de agua embalsada entre los dos pantanos baja por debajo de los 688 hm3 y al alcanzarse nivel 3 se aprueba unilateralmente por parte del Ministerio y tiene que ser una decisión motivada y discrecional. No obstante, desde la Junta piensan que es un decisión «totalmente arbitraria», porque en aquel momento la cuenta cedente estaba a un volumen de agua embalsada del 17% y la cuenca receptora del 50%, es decir «no creemos que haya motivación legal para poder aprobar este trasvase», enfatizó. Y tampoco consideran que sea una decisión proporcional porque el Ministerio tomó «de forma interesada» los datos de principios de mes que reflejaban una cantidad de 470 hm3, un 30% por debajo de lo que se fija como límite en nivel 3, de manera que estaba mucho más cerca del nivel 4. En todo caso, el Gobierno regional opina que se debería haber arbitrado un sistema proporcional para haber aprobado mucha menos cantidad de agua en el trasvase.

Sea como fuere, la titular de Fomento incidió en que la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha sigue tendiendo la mano para «sentarnos a hablar, a dialogar, y a buscar soluciones comunes porque sabemos que el trasvase tal cual está planteado tiene fecha de caducidad». Con mano tendida, pero recurriendo los trasvases si es necesario judicialmente. De hecho, anunció que están elaborando el recurso también para el trasvase de 15 hm3 aprobado el pasado viernes.

Por último, De la Cruz dijo que en caso de que se aceptara el recurso de la Junta, «el problema es que el agua ya está enviada», pero aún así el objetivo es que se siente «jurisprudencia» para ayudar a poner el punto de mira sobre la situación que se está viviendo en los pantanos de cabecera en esta región. «El daño ya está hecho, pero que se sienten unas bases para poder replantearnos el trasvase en su conjunto», reclamó.