La Dirección General de Tráfico (DGT) ha emprendido una batería de nuevas medidas sobre la gestión de la velocidad con las que persigue reducir las muertes en carretera, principalmente en las vías convencionales. Unas medidas necesarias si se tienen en cuenta datos como los cosechados en las dos campañas específicas de control de velocidad desarrolladas por Tráfico el año pasado. Operativos que se saldaron con más de 1.500 conductores sancionados en la provincia de Toledo, lo que representa el 3,7 % del total de los vehículos controlados, ya que se rozaron las 41.500 inspecciones.

La primera campaña se desarrolló entre el 31 de marzo y el 6 de abril y concluyó con 540 denuncias efectuadas de los 14.500 vehículos controlados. La segunda tuvo lugar en el periodo del 18 al 24 de agosto y registró cerca de 27.000 inspecciones, de las que 998 acabaron con sanciones.

el resto de la región. En el conjunto de Castilla-La Mancha  se examinaron a un total de 177.600 conductores y la cifra de denuncias por circular a una velocidad superior a la permitida  se situó en 6.700, lo que representa el 3,8 por ciento del total, un porcentaje prácticamente igual al de la provincia de Toledo.

Cuenca fue la que registró mayor volumen de infracciones por exceso de velocidad, concretamente 1.868, seguida de cerca por la provincia de Ciudad Real que rozó las 1.800. Muy por debajo aparecen Guadalajara (1.023) y Albacete (512). En total, la región cerró las campañas con más de 6.700 ciudadanos que conducían superando los límites de seguridad.

campaña camiones y furgonetas. La vigilancia específica de camiones y furgonetas es otra de las ‘obsesiones’ de la DGT. De hecho, entre las nuevas medidas a aplicar por Tráfico se incluye que los radares distingan qué tipo de vehículo ha cometido la infracción de velocidad, para así aplicar la sanción en función de la limitación específica aplicable a cada uno, porque los turismos y las motocicletas  tienen unos límites superiores a los de camiones, autobuses y furgonetas.

La DGT desarrolló hace unos días, entre el 9 y el 15 de febrero de 2015, una operación especial de vigilancia y control de camiones y furgonetas en todo el país. La operación se saldó en la provincia de Toledo con un total de 1.642 vehículos inspeccionados y con 190 denuncias, lo que representa el 11,6 por ciento del total, según los datos ofrecidos por la Jefatura Provincial de Tráfico.

La Guardia Civil y la Policía Local se encargaron de efectuar los controles en las carreteras de la capital regional. La mayor parte de ellos corrieron a cargo de los agentes de la Benemérita, concretamente 1.348 de los 1.642, mientras que los 294 restantes correspondieron a las policías locales de Fuensalida, Illescas, Méntrida, Ocaña, Seseña y Talavera de la Reina, que tramitaron 14 denuncias (10 en Illescas, dos en Fuensalida y otras dos en Seseña).

Entre las irregularidades que suelen dan lugar a las denuncias, destacan el exceso de peso portado o el exceso de horas de conducción, así como problemas en la documentación tanto del transportista como del vehículo.

En la campaña la DGT se encargó de controlar tanto a furgonetas como todo tipo de camiones, independientemente del país en el que estén matriculados, incidiendo la vigilancia en aspectos como la velocidad, las horas de conducción y descanso o el tacógrafo.

Igualmente, controlaron el exceso de peso, defectos técnicos, la seguridad de la carga transportada, la documentación del vehículo y el conductor, el uso del cinturón de seguridad por parte del conductor y de los ocupantes, la conducción bajo los efectos del alcohol o las drogas y la utilización del teléfono móvil, entre otras cuestiones.

Solo contabilizando los datos de los controles de la Guardia Civil, Ciudad Real fue la provincia de Castilla-La Mancha con mayor número de inspecciones y de denuncias en términos absolutos. Contabilizó un total de 1.418 vehículos examinados y 213 sancionados, lo que representa el 15 por ciento del total.

Además, la campaña llegó a 1.206 camiones y furgonetas de la provincia de Albacete, de los cuales solo 87 contaban con alguna irregularidad, es decir, el 7,2 por ciento, registrando el porcentaje más bajo de la región.

En Guadalajara, los agentes de la Guardia Civil efectuaron un total de 586 controles y tramitaron  128 denuncias,esto representa un 21,8 por ciento. Mientras tanto, Cuenca contabilizó 40 irregularidades de los 341 vehículos inspeccionados en la campaña, es decir, el 11,7 por ciento acabaron con denuncia.

El informe de la DGT revela que cerca de 5.000 camiones y furgonetas fueron examinados por la Guardia Civil en las carreteras de Castilla-La Mancha y cerca de 700 recibieron sanciones por alguna irregularidad. A estas cifras hay que sumar los 294 controles de la Policía Local en la provincia de Toledo y las 14 denuncias tramitadas.