Genio Afinador

LT
-

Juan José Montero cuida y mima cada uno de los órganos de la Catedral porque es esencial «que siempre estén vivos, que vibre la madera y el metal» para que estas grandes máquinas demuestren todo su potencial

Sube y baja casi sin hacerse notar, como si formara parte de las entrañas de un templo que para Juan José Montero es, sobre todo, maravillosamente musical. En las últimas semanas, cuando se cierran sus puertas, este toledano se sienta frente a los teclados de los diez órganos activos de la Catedral porque siete de ellos participan en las batallas de órganos -que hoy comienzan- para mimarlos de cara a la contienda. El hacedor de este encuentro cuida de ellos con la delicadeza de quien sabe qué es lo que necesita cada uno porque «requiere un mantenimiento exhaustivo» y personalizado.