Fue el 1 de enero de 2014. El Daesh entraba en la llanura de Nínive (Iraq) y arrasaba a su paso. Cuatro años y medio después, una marea humana mucho más pacífica dio una ejemplar respuesta. Pañuelo amarillo al cuello, los voluntarios de 'Santiago en Marcha', que ayer vivió su XIII edición, han puesto su granito de arena para la reconstrucción de las viviendas arrasadas en aquella guerra, en la localidad de Qaraqohs.