A poco más de quince días para su celebración, la Nocturna de Toledo ya ha superado los 2.000 inscritos. Desde la organización se confía en acercarse al cupo marcado de 3.800 y como reconoce Rubén Lozano, «es muy posible que lleguemos por los datos que tenemos de otros años».

Habrá una mayor animación en las calles, con la participación del grupo Billete de ida, que tocará en vivo. Además, parece que la línea de meta no estará en el patio del Alcázar como se había anunciado. Y es que, la Policía Local lo ha desaconsejado, por lo que podría trasladarse a la calle de la Unión, en la zona de la estatua del Ángel del Alcázar. «Se necesita de una zona amplia para dar cabida a todos los participantes», añade.

Esta modificación ha obligado a recortar parte del trazado, con el objetivo de no alargar más metros la distancia establecida de 8 kilómetros. De todos modos, hay que recordar que existe la opción de participar en la distancia corta de 5,3 kilómetros, con salida en la plaza de toros.

Rubén Lozano, organizador de la carrera, es optimista y piensa que muchos atletas dejan para la última hora la formalización de su inscripción, basándose en los datos de ediciones anteriores. «Sería una satisfacción quedarnos sin dorsales», reconoce. Todavía no tiene nombres concretos de corredores, pero se espera la presencia de los mejores del atletismo popular de la provincia, así que está convencido de que habrá «un muy buen cartel».

Por otro lado, Lozano asegura que este año se han incrementado las inscripciones de fuera de la provincia de Toledo. Asimismo, han aumentado los patrocinadores y colaboradores, entre ellos la Academia de Infantería, que en 2019 cumple su centenario. Por eso, con la inscripción, los participantes recibirán una visita gratuita al Museo del Ejército. Habrá muchas más sorpresas que todavía no se han anunciado, como que habrá un premio especial para los primeros clasificados, en chicos y chicas, en la prueba de 5,3 kilómetros.