El grupo, ataviado con el imprescindible casco -blanco- de obra, recorrió las recién creadas estancias de un inmueble que, hasta hace 30 años, fue el lugar en el que se educaba a los Seises o Infantes que ayudaban a las tareas litúrgicas de la Catedral. Este edificio definido por Braulio Rodríguez como «emblemático» y que llegó a albergar a más de 160 alumnos, luce una imagen -según apuntaron algunos de los que allí habitaron- totalmente distinta a la que tuvo en su día.
En parte porque las obras se han centrado, en una primera fase, en abrir espacios (antes disgregados en aulas) destinados a exhibir piezas textiles de dimensiones. Por ello, y apostando por ganar soportes en los que colgar los tapices, las ventanas serán cegadas en el interior para, además, proteger las ‘telas’ de la luz exterior. No hay que olvidar que estas piezas requieren de condiciones técnicas para su conservación. Razón por la que la climatización, de frío y calor, se ubicará en el suelo añadiendo una renovación de aire que aporte la humedad y la temperatura adecuada.
Los trabajos, que estarán finalizados «antes de que termine el año», siguen un «buen ritmo» y se ciñen a las necesidades de organización en torno a salas que ya tienen asignadas contenido. Durante la visita, los encargados del proyecto iban marcando los lugares sobre los que ubicar los 26 tapices que ahora descansan en la Catedral, y los espacios a ganar con las modificaciones de algunos detalles como, por ejemplo, la desaparición de una de las escaleras.
- Foto: Víctor Ballesteros Además de los grandes textiles, de las piezas litúrgicas (que ahora se muestran una sala junto a la Sacristía), y de las obras de orfebrería, el arzobispo de Toledo apuntó la posibilidad de que «dentro del patio se instale el monumento del Jueves Santo». Hay que recordar que se trata de la última obra conocida de Ignacio Haan cuyos planos fueron realizados el 30 de septiembre de 1805. Se trata de una pieza que se montó por primera vez en 1807 y que durante el siglo XX sólo fue instalada en cuatro ocasiones. Alfonso XIII la contempló y elogió en 1928. De momento, y puesto que los pasos están marcados en el proyecto museológico, Braulio Rodríguez consideró que este Museo va a estar listo para ser visitado en 2014 con motivo de los «fastos del año Greco».
3 millones de euros. Este proyecto, presupuestado en tres millones de euros, será sufragado a medias entre el Cabildo y un grupo de mecenas que ha querido colaborar en esta rehabilitación. Así, Endesa, ACS y el Grupo Liberbank abonan un 50 por ciento del presupuesto total.
- Foto: Víctor Ballesteros La semana pasada el presidente del Grupo Liberbank, Manuel Menéndez, selló la colaboración con este proyecto de recuperación y la con la reforma de la Sacristía con la aportación de 100.000 euros. Por su parte la Fundación Endesa hizo lo propio, en mayo, comprometiendo 600.000 euros. Cantidad que se suma al acuerdo, suscrito en abril, con la Fundación ACS por 300.000 euros.
Sobre estas aportaciones, el arzobispo de Toledo apuntó que el nuevo Museo de Textiles «ayudará a la ciudad posibilitando un nuevo reclamo de visita en el Casco».