A partir de mañana, el balonmano toledano se convertirá en el brazo izquierdo de España. O mejor dicho, Jorge Maqueda y Ángel Montoro. Ellos serán los encargados de abrir las defensas rivales como martillos pilones en el Campeonato del Mundo que arranca este viernes en territorio nacional.
Ambos, los dos máximos exponentes del trabajo de cantera que se lleva realizando desde décadas en Toledo, asumirán la responsabilidad del lateral derecho del combinado español. Dos jugadores que encarnan la nueva savia de la que se nutre una selección que ya fue campeona del Mundo en 2005. Dos toledanos con recorridos similares.
Para Valero Rivera, Jorge Maqueda (24) es algo más que un jugador, el hombre que nunca falla. Él sacó al quereño del anonimato para situarlo ante las puertas de la elite, que el propio lateral se ha encargado de derribar.
- Foto: David Pérez En otras palabras, Rivera se transformó en el mentor de Jorge Maqueda. Sólo él se fijó en aquel joven de Quero que adelantaba generaciones con su físico. Así, en categoría cadete y durante un campus que llevaba su nombre, el seleccionador nacional puso sus redes sobre él y el toledano pasó de jugar en Villafranca de los Caballeros a desembarcar en la prolífica cantera del FC Barcelona.
Allí se forjó el aliento ganador que le rodea actualmente cada vez que salta a una pista. Visceral. Pasional. Desatado. La oportunidad de debutar en la Liga Asobal llegó de la mano del BM Alcobendas en 2007. Desde entonces, fue cobrando protagonismo a medida que su juego no pasaba desapercibido para nadie.
Finalmente, fue el CAI Aragón el que le ofreció el siguiente peldaño, llegando a disputar competiciones europeas. Ya en el equipo zaragozano, Maqueda se hizo hueco en la Selección, donde ahora es indiscutible. Sin embargo, el salto definitivo, tras su fichaje por el HBCNantes francés, llegó en dos competiciones internacionales, el Europeo de 2012 y los Juegos Olímpicos de Londres, donde lideró el ránking anotador de los españoles.
El techo de la Asobal. La aparición de Ángel Montoro (23) hizo temblar el cielo de la Asobal. El jugador toledano, forjado en la cantera del Beatriz Hoteles Amibal, al igual que el portero Gonzalo Pérez de Vargas, se convirtió en uno de esos diamantes que todos quieren en propiedad. FC Barcelona o Granollers se disfrazaron de cazatesoros y pelearon por su fichaje, pero finalmente ‘Pichu’, como se le conoce en el mundo del balonmano, recaló en el Ademar León.
Y desembarcó con sus 212 centímetros como carta de presentación. Tres dígitos que han convertido a Ángel Montoro en el techo de la Liga Asobal. En el conjunto leonés se convirtió en un líder hasta que su rodilla dijo basta. Una rotura del ligamento cruzado anterior, en un partido de Champions ante el equipo danés del AG Kobenhavn, le mantuvo más de seis meses alejado de las pistas.
Pero el percance no le impidió fichar por el FCBarcelona esta misma temporada, cumpliéndose así un viejo deseo del club culé. Con el diamante en sus manos, el equipo blaugrana ha permitido la explosión definitiva de un Ángel Montoro que disputará su primer gran campeonato internacional después de que Rivera le eligiese por delante de Eduardo Gurbindo.
Así se llega al día de mañana, en el que España debuta en ‘su’ Mundial ante Argelia (19:00 horas, Caja Mágica de Madrid) con los dos toledanos asumiendo un papel más que destacado. Jorge Maqueda se convierte en un arma clave para Valero Rivera por su determinación en ataque y por su gran capacidad de sacrificio en defensa. Por su parte, ‘Pichu’ Montoro será la alternativa a defensas cerradas con su potente lanzamiento desde diez y once metros. Dos laterales derechos. Dos lanzadores zurdos. Dos jugadores toledanos. El brazo izquierdo para guiar a España hacia su segundo Mundial.