Talavera presume de sus tradiciones

Lola Morán Fdez.
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La ciudad cuenta desde el 8 de septiembre en los Jardines del Prado con un nuevo mural de cerámica, dedicado a los antiguos mercados de ganado. Consta de 1.500 azulejos y tiene unas dimensiones de 3 metros de alto por 20 de largo

Dos de la tradiciones más significativas de la ciudad se dan la mano en un nuevo mural del que puede disfrutar desde hoy la ciudadanía. Cerámica y ganadería se conjugan en la obra que el equipo de Óscar Rodríguez Sánchez, gerente de Cerámicas Óscar Talavera, ha elaborado para su instalación en los Jardines del Prado. Consta de 1.500 azulejos y tiene unas dimensiones de 3 metros de alto por 20 metros de largo que se han pintado a lo largo de ocho meses de trabajo, a los que se han sumado otros dos para preparativos, con tareas como el diseño del mural.

La única exigencia del Ayuntamiento para este mural fue que se dedicara al Mercado de Ganado, si bien después el artista ha tenido libertad a la hora del diseño y composición. Así, en estos 60 metros cuadrados se rinde homenaje a la tradición ganadera de la ciudad y de la comarca con diferentes escenas para cuyo diseño se han tomado como referencia imágenes del archivo municipal.

Partiendo de estas imágenes datadas entre finales del siglo XIX y principios del siglo XX se han plasmado sobre este mural transacciones reales del mercado, en la época en la que se asentaba en los Jardines del Prado y en la Alameda.

La obra se divide en tres partes, cada una de ellas dedicada a una de las cabañas de las que constaba el Mercado de Ganado: animales de carga -mulas, caballos y burros-; ovejas y cabras; y vacas.

Los personajes que aparecen representados son por tanto personas reales, anónimas, en las que puede que quienes se acerquen hasta allí para contemplar la obra descubran a familiares, amigos o conocidos.

Para separar estas tres partes se ha recurrido a los arcos del Puente Viejo, en cuyos pilares se han colocado dos escudos de la familia que ha financiado el mural. «El puente era la entrada natural de todo el comercio que entraba en Talavera», ha explicado a este diario Rodríguez acerca de la elección de este elemento.

En el dibujo central se aprecia de fondo la entonces ermita del Prado y la plaza de toros, de tal manera que, dada la ubicación del mural, «es realmente como si el espectador estuviera dentro del propio mercado». «El emplazamiento de esa gente que está haciendo la transacción es exactamente donde está colocado el panel, esas personas estuvieron en este mismo lugar haciendo esa transacción», ha explicado al respecto el ceramista.

En este mural se pueden contemplar escenas relativas al cierre del trato entre ganaderos y el regateo, momentos en los «que una persona buscara las faltas de lo que iba a comprar y el otro sacaba las virtudes», algo que queda reflejado también en las expresiones de los personajes del mural. También aparecen otros ganaderos pesando ovejas, todo en actividades «como se hacía antes, hablando, dialogando, con un trato muy personal, muy humano». Aparece de igual manera una caseta municipal de tasas, en la que se abonaba el precio establecido para poder vender animales en este mercado.

Las escenas se rematan con una greca renacentista con los tradicionales colores azul y blanco en la parte superior, tonos a los que se suma el amarillo en la parte inferior de la obra. La ornamentación se completa con dos medallones en los que aparecen representados la Puerta de Sevilla y La Colegial.

«Hemos querido hacer un trabajo tradicional sin salirnos casi de los cánones de la cerámica talaverana, utilizando los colores y la forma tradicional de trabajar», ha explicado, «una cosa clásica en un entorno clásico para que dure para siempre».

 

Orgullo. Para Rodríguez, elaborar este mural «es un orgullo, sobre todo por la importancia que tiene, de dimensiones, el emplazamiento en una zona emblemática de Talavera, junto al estanque de los patos y ha sido un orgullo hacer un trabajo de este tipo». Es el primero que realizan de estas dimensiones en su taller, lo que ha supuesto «un reto de diseño, de ejecución y de todo, porque son muchísimos azulejos y es complicado hacer un trabajo tan grande». Por ello, se ha mostrado «contento y agradecido» tanto al promotor que le hizo el encargo como al Ayuntamiento, impulsor de esta iniciativa, por la «confianza» depositada en su equipo. Ha deseado que esta pieza dure «muchos años» y que pueda ser disfrutada «por todos los talaveranos y visitantes».

En la inauguración, el alcalde, Jaime Ramos, ha dicho que hoy era «un día feliz» tanto por la festividad de la Patrona como por que en este día tomaba «más forma esta ruta de los murales de cerámica de Talavera». Este nuevo mural, con los mercados de ganado como temática, supone el cuarto que se inaugura de esta ruta que, en una primera etapa, contará con un total de ocho. Sobre esta cuestión, ha destacado el «afán» del equipo de Gobierno por «hacer que Talavera sea un museo de cerámica al aire libre». En lo que respecta al resto de murales, el alcalde ha informado que están todos «en ejecución» y la previsión es que el próximo enero estén todos instalados.

Ramos ha agradecido a Alfredo Viedma la financiación de este mural a través de un convenio suscrito hace ocho meses entre el Ayuntamiento y el gerente de la empresa Six Valves, así como al ceramista que ha elaborado este mural.

Por su parte, Viedma ha destacado su «alegría» por la inauguración de este mural. «Me siento muy orgulloso de ser de Talavera, mis hijos y mis nietos son de Talavera, mis hijos están trabajando en Talavera y hemos creado aquí nuestra empresa, que lleva 40 años, y estamos muy orgullosos de estar en Talavera y por eso hemos hecho este mural, para que se quede y que mis nietos cuando vengan por aquí lo vean algún día dentro de cuarenta años cuando yo ya no esté aquí», ha explicado, para concluir asegurando que desea «que dure muchos años y que la gente lo conserve y que lo cuidemos entre todos».