Un árbol es mucho más que una planta perenne o caduca. Un árbol es vida, es ciencia, es medio ambiente, es arte y, sobre todo, es conciencia. Así de claro lo tiene  la Fundación Félix Rodríguez de la Fuente, que forma parte del proyecto ‘LIFE+’, que incluye la muestra itinerante ‘EnArbolar’, que se expone desde ayer en la Real Fundación de Toledo, la primera parada de una exposición que recorrerá más de una veintena de ciudades en los próximos tres años.

La muestra conduce al espectador a través de una serie de paneles explicativos y un intenso recorrido audiovisual que informa y da a conocer las especies más características de Castilla-La Mancha y de España, en general, y ofrece una llamada de atención sobre la necesidad de conservar la flora y la fauna, amenazadas en muchos entornos a pesar de un buen número de normativas.

Al respecto, el director de este proyecto, César Javier Palacios, recordó ayer que nuestra región forma parte de la Red Europea 2000, que protege dos millones de hectáreas, así que hay un 24% de superficie protegida, pero a pesar de esta condición y de una buena normativa para la protección de especies singulares, que data de 1990, lo cierto es que la protección sigue siendo escasa. Palacios aseguró que desde que se puso en vigor sólo se han protegido cinco árboles y dos arboledas, dos de ellos dos antiguos nogales que ya murieron aunque siguen protegidos en la documentación.

La concienciación es el objetivo fundamental de la muestra, dado que los espacios naturales están amenazados por los incendios, los planes urbanísticos, el cambio climático y la desertización, entre otras. En este caso,  el  director del departamento de Árboles Monumentales de Imelsa de la Diputación de Valencia, y director científico del proyecto, Bernabé Moya, alertó de la situación y explicó que en España se ha destruido el 80% de los árboles monumentales en los últimos cien años. «Unos resultados catastróficos» que ponen de manifiesto la necesidad de proteger los ecosistemas desde los ayuntamientos mediantes ordenanzas municipales, sobre todo, «porque desde los propios municipios se reivindica el patrimonio cultural».

Moya reconoció que una manera de proteger la flora, sobre todo, la de carácter singular, es poniendo en valor «su interés turístico», puesto que con una buena gestión pueden convertirse en «un motor de desarrollo sostenible en zonas rurales y espacios protegidos».

recorrido. La exposición, financiada por la Unión Europea y la Diputación de Valencia, administración que lleva años investigando y protegiendo árboles singulares, se completa con la obra del acuarelista Fernando Fueyo, que ha prestado su pincel para ilustrar varias especies, y con cuatro creaciones de Paco Roca, un conocido ilustrador que ha ganado un Goya por la película ‘Arrugas’.

Las fotografías de Jorge Sierra, Juan Carlos Muñoz, José Díaz y Jonathan Díaz Marbá, expertos profesionales en el ámbito medioambiental dan color a una exposición  que permite ahondar en la protección de los bosques maduros de la red Natura 2000 y de la Red de Espacios Protegidos de España. Y todo ello de la mano de una fundación con el sello particular del mítico divulgador ambiental, Félix Rodríguez de la Fuente.

La muestra es gratuita y se podrá visitar todos los días hasta el 21 de enero. Si bien, de lunes a sábado el horario es de 10 a 19 horas y el domingo, de 10 a 15 horas. La iniciativa se completará con una jornada de conferencias el 16 de enero, pero el proyecto es mucho más ambicioso porque se ha creado también una aplicación para móviles y tabletas con el objetivo de que los usuarios conozca los árboles de su entorno.