Surrealismo. Autómata en estado puro

Javier Villahizán (SPC)
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Seis exposiciones recorren España mostrando esta corriente creativa que se adentra en el inconsciente con autores de la talla de Dalí, Giacometti o Miller

Surrealismo. Autómata en estado puro

El subconsciente artístico de Dalí, Lee Miller, Dorothea Tanning, Giacometti y Lempicka se descubren este otoño y buena parte del invierno en las principales salas expositivas del país, ofreciendo un universo surrealista lleno del más puro automatismo y repleto de metáforas.

Que mejor ejemplo para ello que hablar de Salvador Dalí y de uno de sus cuadros más icónicos, Rosas sangrantes (Museo Thyssen, hasta el 27 de enero), en donde muestra algunas de sus obsesiones, como son la sexualidad y los motivos naturales -plantas y flores-. Las cuatro rosas rojas, de extremo realismo, sangran en el abdomen de una mujer simulando un climax que es observado por un hombre.

Además de Dalí, el museo madrileño presenta una selección de 13 obras de la Colección de Arte Abanca que abarca un arco cronológico que se extiende desde 1923 hasta 1976 con obras de Max Ernst, Miró, Maruja Mallo o Matta, entre otros. 

La instalación arranca con una pintura de Giorgio de Chirico, precursor del movimiento, y un óleo de Max Ernst. Continúa en los años 1930, cuando Miró radicaliza su lenguaje pictórico y concentra los medios expresivos hasta llegar a su estilo maduro más característico. La exposición termina con una selección de piezas realizadas tras la Segunda Guerra Mundial en las que Matta, Wilfredo Lam y Eugenio Granell tratan de poner las bases de una mitología moderna.

El Reina Sofía, también en Madrid, se adentra hasta el 7 de enero en una de las mujeres artistas más importantes y polifacéticas del siglo XX, Dorothea Tanning (1910–2012) aunque ella misma rechazaba esa asociación. Su obra cuenta historias inscritas en un universo personal, con el que da sentido a la vida moderna, y en un entorno surreal –lleno de fantasía y fantasmas– perfilado a través de un espacio que se presenta al mismo tiempo como seductor y pernicioso.

Mientras, la exposición de Lee Miller y el surrealismo en Gran Bretaña (Fundación Joan Miró, en Barcelona, hasta el 20 de enero) aproxima al visitante a uno de los polos más complejos de este movimiento, el de esta fotógrafa estadounidense afincada en el Reino Unido que aporta al mundo su especial visión de las cosas.