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Ya se conoce el balance definitivo del macrobotellón de ITI celebrado este jueves en la Peraleda. Una cuadrilla de operarios del servicio municipal de limpieza inició los trabajos de recogida de basura en torno a las seis de la madruga del viernes. Un total de 1.540 kilos de residuos en el recinto ferial, entre botellas y restos de la fiesta. Son seis toneladas menos que el año pasado cuando se recogieron 7.240 kilos, según confirmó ayer el concejal de Gestión de los Servicios del Ayuntamiento de Toledo, Gabriel González.
El edil dijo que estas cifras demuestran que la afluencia de público fue mucho menor que en ediciones anteriores. Nada que ver con los 11.000 jóvenes que se congregaron en 2014 en La Peraleda.
González vino a confirmar lo que habían trasladado a este periódico el día anterior tanto la Policía Nacional como la Policía Local y Protección Civil, quienes también destacaron que no se había producido ningún suceso destacado, ni peleas ni atenciones sanitarias por intoxicaciones etílicas derivadas del consumo excesivo de alcohol, a diferencia de lo ocurrido en anteriores ediciones.
La Policía Local estableció un dispositivo policial en el recinto en torno a las nueve y media de la mañana prolongándose durante toda la jornada, según explicó a este periódico el inspector Antonio Sánchez Palencia.
Evitar molestias. Uno de los puntos fuertes, concretó, tuvo que ver con la prohibición de acceder a la Peraleda con equipos de música de gran potencia para evitar molestias a los pacientes del Hospital de Parapléjicos y a los vecinos del entorno. A pesar de todo, la Policía Local recibió una alerta a las 20,30 horas por el excesivo volumen de uno de estos aparatos, según informaron fuentes municipales.
Los controles de alcoholemia y drogas empezaron a las cinco y media de la tarde y se prolongaron hasta las doce de la noche, tanto en la salida de la carretera de la Puebla de Montalbán por parte de la Guardia Civil como en el Puente de Parapléjicos, de los que se encargaron los agentes de la Policía Local.
Estos últimos realizaron un total de 980 test de alcohol, de los que nueve resultaron positivos. De ellos, cinco se saldaron son sanciones administrativas y los dos restantes con sanciones penales por superar los 0,60 mg/l de alcohol en sangre. Estos conductores se tendrán que enfrentar a un juicio rápido y a la retirada del permiso de conducir. Fuentes municipales confirmaron también dos positivos en drogas de los cinco pruebas realizadas.
El inspector dijo que también estaba previsto realizar controles móviles durante la madrugada, así como inspecciones de aforo y de puertas de emergencia en los locales de copas del Casco histórico, que habían ofrecido numerosas ofertas tras el macrobotellón. En cualquier caso, desde el Ayuntamiento destacaron que no se registró ninguna incidencia al respecto.
¿El próximo jueves? Efectivos de Protección Civil alertaban de que se estaba convocando una nueva fiesta de ITI para la semana que viene debido a que el festivo y el mal tiempo habían aguado el macrobotellón del jueves. Desde la Concejalía de Seguridad Ciudadana estarán alerta para evitar cualquier incidente aunque desde el Ayuntamiento confían en que esta ‘doble convocatoria’ se quede en nada.