El pasillo de la sala Borbón-Lorenzana acoge, hasta el próximo 8 de noviembre, una pequeña muestra del trabajo de Andrés López Santiago. Este toledano exhibe piezas en las que se contemplan los distintos usos y costumbres plásticas en las que se mueve con soltura.

Así, y porque las técnicas y las temáticas son diversas, oferta al visitante un recorrido que atrapa las típicas instantáneas de la ciudad y sus vistas pero que, por fortuna, recala en piezas más comprometidas con los planos, las reinvenciones y las estéticas más consistentes.

En este capítulo, y por huir de las tediosas referencias locales que tanto gustan al toledano de toda la vida, cabe apreciar la obra ‘Escaparate’ por su impronta, su juego de planos y su ritmo cromático tan adaptado al concepto de lo urbano en la pintura. Esta composición, a la que anteceden las llamadas ‘Pez Plutónico’ y ‘Soltera’, denotan un saber hacer acomodado a formas expresivas atractivas y dinámicas en las que el tratamiento de la materia es protagonista.

No está de más integrar en este grupo destacado el óleo ‘Medina antigua de Tanger’ por su atmósfera y buena resolución.

Iniciando paseo expositivo en la Biblioteca regional, López Santiago ofrece dos composiciones -‘Adán y Eva’ y ‘El silencio de los corderos’- muy cercanas al realismo mágico tanto en la utilización de las gamas cromáticas como en las metáforas argumentales. Porque el rebaño de ovejas contempla, domesticado, los cambios de paisaje propiciado por la decisión de otros, pero por él sufrido.

Y es que, como ya comentó el autor cuando participó en la exposición madrileña ‘Surrealismo Ibero Ruso’, estos son «buenos momentos para el surrealismo». De hecho, aseguró que su objetivo era «expresar la idea de que quienes están pagando la crisis económica no son los responsables de ella».

Sobre el autor de esta exhibición, tan sólo apuntar que Andrés López Santiago es un artista toledano que, además de su faceta como creador, también ha trabajado en el mundo de la publicidad y la comunicación. Desde hace 16 años imparte clases de pintura en su academia, ‘Tres colores, tres culturas’, que en la actualidad cuenta con cerca de 100 alumnos, la mayor parte mujeres.