Manu Calleja reconoció que no fue un buen partido de su equipo… en ataque. El técnico cántabro resumió el 1-0 del CD Toledo ante el Azuqueca como «el clásico encuentro donde no siendo mejor, ganas». Reconoció que técnico verde que, aún así, sus jugadores trabajaron mucho: «Apretamos, fuimos, intentamos eliminar las segundas jugadas de Pancorbo y defendimos bien el balón parado».
Por tanto, resaltó ese aspecto defensivo que le permitió al cuadro toledano terminar con la portería a cero, pero es verdad, agregó, que «estuvimos lejos de lo que queremos en ataque». Desde su punto de vista, tienen una cosa buena, y es que «sabemos que hay jugadas de calidad y acciones determinadas que te pueden ganar un partido». De todos modos, considera que el domingo se ganó «a base de coraje, entrega, lucha y casta, aunque tenemos que hacer muchas más cosas con el balón».
Calleja entiende que lo mejor siempre son los tres puntos, aún jugando bien, ya que «en Guadalajara merecimos ganar y nos vinimos con cara de primos», aseguró. También considera que esta vez el descuento no fue «tan fatídico», tras añadir sólo dos minutos. «Por probabilidad, no nos tocaba, pero hay que estar más concentrados», bromeó.
Asimismo, el entrenador toledano felicitó a los jugadores por su esfuerzo y la peña Komandos Verdes porque «estuvieron animando cuando lo estábamos pasando mal, así que nos echaron una mano». Por lo demás, cree que el público del Salto del Caballo «puede pitar», incluso asegura que los mismo que pitaron al descanso «lo hicieron cuando marcamos el gol», dijo un Manu Calleja autocrítico en ese sentido: «Nosotros somos los que tenemos que cambiar esos pitos».
También habló sobre el dominio del Azuqueca en el campo verde, justificado en que «prefería no elaborar y sí robar para que no golpearan primero con Pancorbo». Por el rival, considera que lo lógico es que el CD Toledo tuviera «menos posesión para ser más eficaces». Y sobre Álvaro Antón, sí que lo ve por dentro mucho mejor porque «rinde más cerca del balón». Habló sobre Burgui y Crespo, dos jugadores que se marcharon «con una inyección de moral importante». Calleja dice que les ha ganado para la causa porque, aunque no tengan un rol prioritario, «tienen que participar y generar competencia en la plantilla».
Por último, el preparador cántabro confesó que echó más de menos a Iván Bueno, «un futbolista que es muy bueno, como dice su apellido» y que se notó su ausencia «cuando las bandas estaban fatigadas», ya que Adri lleva tiempo sin jugar y Crespo y Burgui debutaron ante el Azuqueca.