Tras ocho días de rastreo, efectivos del dispositivo de búsqueda de Arthur, el niño de cinco años desaparecido a consecuencia de las inundaciones en el Levante de Mallorca, encontraron ayer su cuerpo sin vida en Son Carrió. Con esta se eleva a 13 la cifra de fallecidos por la riada en la localidad de Sant Llorenç des Cardassar. 

En su cuenta de Twitter, la Guardia Civil detalló que «desgraciadamente se han cumplido los peores presagios» y «ha sido localizado el cadáver de Arthur», el menor desaparecido en la riada. 

El pequeño fue encontrado por el operario de una pala excavadora enterrado en barro y ramas en una zona prioritaria de búsqueda próxima al pueblo. «Era un área crítica», describió Paco Molina, portavoz de la Guardia Civil de Baleares, en alusión a los puntos de rastreo preferente, en virtud de los análisis de movimientos de víctimas y residuos por parte de técnicos del instituto armado.

Molina agregó que la Guardia Civil tiene previsto mantener la búsqueda de vehículos arrastrados hasta el mar en los próximos días, al igual que el dispositivo de regulación del tráfico.

El menor viajaba con su madre y su hermana a bordo de un coche cuando fueron alcanzados por la riada el pasado 8 de octubre. La mujer consiguió sacar a la niña del vehículo, pero después el automóvil fue arrastrado por la corriente. El cuerpo de la madre fue encontrado en el interior del coche. 

El pasado jueves, el operativo encontró efectos personales que podrían ser del menor y el pasado sábado, un particular localizó su mochila al sur de S’Illot.