El sistema electrostático que pretende instalar la Concejalía de Medio Ambiente en La Colegial para evitar la anidación de las cigüeñas ya ha sido implantado en la Catedral de Huesca. Según explicó a este diario la gerente de la empresa encargada de estas labores, Antonia Molina, el mecanismo es sencillo. Se basa en una central de mando que proporciona impulsos eléctricos a una red de conductores, instalados en las zonas de posado de las aves. Esos canales transmiten una «pequeña y absolutamente inofensiva descarga electroestática» que molesta al animal, impidiendo que se pose en dicha zona. Con este sistema se pretende que las aves, que nunca se acostumbran a esta molestia, se decidan finalmente instalar su nuevo hogar en los nidos que se instalarán junto al Tajo próximamente.