c.m. | TOLEDO

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- Foto: David Perez «Abandonado y en ruinas. Conserva una sólida torre de planta cuadrada y restos de la cerca. La torre, con grandes grietas, está en peligro extremo de hundimiento. Deterioro progresivo del resto». Así se describe el estado de una de las últimas incorporaciones a la Lista Roja del Patrimonio. Se trata del Castillo de Oreja, en Ontígola, y con él ya son ocho las veces que el nombre de Toledo se repite en una enumeración que debería sonrojar a las administraciones que, en esta materia, están llamadas a ser garantes de un patrimonio, en ocasiones, desamparado.

Y puesto que la finalidad de la asociación Hispania Nostra -creadora de la lista- es la defensa, salvaguarda y puesta en valor del Patrimonio Cultural español y su entorno, nunca está de más contemplar la involución (evolución en casos afortunados) de un paisaje poblado de negligencia y dejadez.

Toledo aparece en este deshonroso directorio con los castillos de Almonacid de Toledo;de Guadalerzas, en Los Yébenes; de San Martín de Montalbán; y de Rivadeneyra, en Val de Santo Domingo. Además de la iglesia de Santo Domingo, en el mismo municipio, y del Palacio del Gran Comendador de la Orden de San Juan de Jerusalén en España y sus pinturas, en Madridejos. No falta la representación de la capital con la inclusión de la necrópolis medieval de Toledo -excavada y destruida en su mayor parte ya que al menos 194 tumbas desaparecieron sin haber sido estudiadas- descubierta durante las obras de construcción del Centro Cultural ‘Quixote Crea’, un proyecto actualmente paralizado.

El aspecto positivo ofrecido por esta iniciativa se contempla en la publicación de otra lista destinada a dar cuenta del Patrimonio restaurado o en restauración. En ella lucen proyecto la Atalaya de Valmojado y el castillo de Casarrubios del Monte.

Esta lista -que esta participada por 57 bienes ubicados en Castilla-La Mancha- fue uno de los puntos a abordar en la XXXII Reunión de Asociaciones y Entidades para la defensa del Patrimonio cultural y su entorno organizada este verano en Pamplona. Durante el encuentro, centrado en la participación social y las buenas prácticas en el Patrimonio Cultural, más de cuarenta asociaciones procedentes de distintos lugares de España analizaron la situación nacional desde las peculiaridades de sus municipios de procedencia.

Toledo contó con su aportación, ya que Santiago Palomero, director del Museo Sefardí de Toledo y vocal de la junta directiva de Hispania Nostra, ofreció una ponencia relativa a ‘La importancia de la sociedad civil en la defensa del Patrimonio y la felicidad’.

Presencia toledana. Y es que, además del colectivo Amigos del Museo Sefardí, forman parte de este grupo las asociaciones Montes de Toledo, Corral de Almaguer,  Amigos del Toledo Islámico, Colectivo de Investigación Histórica Arrabal, Grupo arqueológico y de costumbres populares Villa de Orgaz, y Sociedad de Amigos de la Sierra de San Vicente. Entre las instituciones, cabe destacar la participación de la Real Fundación de Toledo, del Instituto Provincial de Investigaciones y Estudios Toledanos, y de la Escuela Taller de Bienes Muebles.

Esta lista aspira a recoger aquellos elementos del Patrimonio Histórico español que se encuentren sometidos a riesgo de desaparición, destrucción o alteración esencial de sus valores. Por ello,  y puesto que esta letanía se actualiza periódicamente, desde Hispania Nostra se solicita «la colaboración de asociaciones, entidades y personas interesadas en la defensa del Patrimonio» que colaboren en la confección de una enumeración que se desea sea cada vez más breve.