Isabel, la serie de ficción histórica de Diagonal TV sobre la reina Católica cuya producción ha resultado tan anunciada como controvertida -los ajustes en RTVE no garantizan por el momento la segunda de las cuatro temporadas de trece capítulos cada una inicialmente anunciadas en 2010-, llegará a las pantallas en los próximos días entre inevitables comparaciones con Los Tudor y el recuerdo de vergonzantes proyectos recientes como Toledo. Coincidencias al margen (la imitación de la serie de ficción británica de Peace Arch Entertainment resulta más que evidente en los trailers promocionales y la caracterización de algunos personajes), la primera temporada de la serie estará ambientada en la Castilla que va de 1461 a 1474, o, lo que es lo mismo, un contexto histórico en el que se produjeron acontecimientos tan convulsos como la ‘Farsa de Ávila’ (1465) y las luchas de poder entre linajes como los Pacheco y los Mendoza, sin los cuales la historia de Castilla-La Mancha no habría sido la misma.
La ciudad de Toledo -que, afortunadamente, no quedará tan expuesta al ridículo como sucedió con la reciente producción de Boomerang TV con título del mismo nombre- cobrará presencia en Isabel no solamente por su gran importancia histórica a finales de la Edad Media, sino por la vinculación directa con esta ciudad de muchos de los protagonistas de la serie. Fue precisamente el toledano Melchor de Santa Cruz, gran especialista de las frases hechas (publicó en 1574 una importantísima colección de dichos, refranes y aforismos), quien atribuyó a Isabel de Castilla un dicho que llegaría a hacerse famoso. Al ponderarse cualquier ciudad que no fuese Toledo en presencia de la reina, ésta exclamaba: «Si tan grande, no tan fuerte; si tan fuerte, no tan grande». Toledo, que en 2004 le dedicó una importante exposición con motivo del centenario de su muerte, fue de hecho el lugar de nacimiento de su hija Juana, bautizada en la parroquia delSalvador.
Los capítulos de Isabel, cuya presentación tuvo lugar en la pasada edición del Festival de San Sebastián, comenzarán con una brillante conjugación de dos grandes referentes de la época: un águila (el símbolo de San Juan Evangelista, que tan a menudo aparece en los emblemas de los Reyes Católicos) y un rebaño de ovejas, que recordaría la pujanza económica de Castilla en época de la Mesta. Desde RTVE aseguran haber prestado gran atención a los detalles históricos (lo cual no es necesariamente una garantía, puesto que esta afirmación suele repetirse al inicio de cualquier serie de ficción inspirada en el pasado). Aún es pronto para conocer este compromiso, y por el momento no parece que moleste a los más puristas el hecho de que Rodolfo Sancho superase hace ya mucho tiempo los 17 años de edad que tenía Fernando el Católico en el momento de su unión.
Sea como sea, la serie siempre será una buena excusa para recordar a figuras como Gutierre de Cárdenas (interpretado por el actor Pere Ponce), que fue alcalde mayor de Toledo y mantuvo una estrecha vinculación con Torrijos, lugar en donde fue enterrado tras su muerte en 1503. Isabel podría permitir a los espectadores toledanos conocer a la reina Juana de Avís (Bárbara Lennie), consorte del trono de Castilla y madre de Juana la Beltraneja, enterrada en la capilla de Reyes Nuevos de la Catedral, o a Gonzalo Chacón (Ramón Madaula), político e historiador natural de Ocaña, primer señor de Casarrubios y figura de importancia fundamental durante la niñez de la reina. Especial presencia tendrá asimismo el rey Enrique IV (Pablo Derqui), tío de Isabel la Católica, que instituyó en Toledo un privilegio tan especial como la celebración del mercado franco de los martes, que todavía se sigue celebrando.
Los primeros momentos de la serie arrancan en la coronación de la reina en Segovia en 1474, cuando Isabel tenía 23 años. Posteriormente, la acción se traslada a su infancia en Arévalo (Ávila). Uno de los hechos más importantes de su adolescencia, relacionado también con tierras abulenses, fue la denominada ‘Farsa de Ávila’, que tuvo lugar en 1465. Fue una conjura en la que participaron importantes miembros de la nobleza castellana y que supuso la destitución simbólica de Enrique IV -representado como un pelele con corona que sería arrojado al suelo bajo el grito de ‘¡A tierra, puto!’- y la proclamación como rey de su sobrino Alfonso (Víctor Elías), hermano, precisamente, de Isabel.
Con la ‘Farsa de Ávila’ tuvieron que ver tres personajes recogidos en la página siguiente: el arzobispo de Toledo Carrillo de Acuña (Pedro Casablanc) y sus dos sobrinos, el Marqués de Villena (Ginés García Millán) y el maestre calatravo Pedro Girón (César Vea). Los tres manifestarán durante la serie su oposición al poder del nuevo valido real, Beltrán de la Cueva (William Miller). Isabel incluirá recreaciones monumentales (a la izquierda, el Alcázar de Segovia) cuya fidelidad histórica no se puede todavía calibrar, interiores cortesanos que recuerdan demasiado a Los Tudor (arriba) y escenas de batalla en donde participarán otros referentes históricos como Gonzalo Fernández de Córdoba, ‘el Gran Capitán’ (Sergio Peris-Mencheta, que, en su interpretación hace años de César Borgia acabaría siendo prisionero de este mismo personaje).
¿Una serie recomendable? Sinceramente, es difícil de valorar a solamente unos días de su estreno por televisión. Quienes fueron espectadores de su primer episodio en San Sebastián salieron de la sala con sentimientos enfrentados y no demasiado conformes con un exceso de cartón piedra, una pincelada de sexo gratuito y diálogos que no parecían especialmente brillantes. ¿Los Tudor a la española? Ya lo veremos.
REPARTO TOLEDANO
Gutierre de Cárdenas (Pere Ponce). Contador del reino y alcalde mayor de Toledo, el personaje interpretado por Pere Ponce (Cuéntame cómo pasó) fue uno de los personajes más importantes de la segunda mitad del siglo XV. Su matrimonio con Teresa Enríquez y su vinculación familiar con la Corona de Aragón le aseguraron una importante posición que años después heredaría su hijo, el primer Duque de Maqueda. Compró Torrijos al Cabildo de la Catedral toledana, iniciando una política de fundaciones en la nueva villa que ha perdurado hasta nuestros días. En ella fue enterrado tras morir en Alcalá en 1503.
Isabel de Castilla (Michelle Jenner) y Fernando de Aragón (Rodolfo Sancho). El monumento que mejor simboliza la relación que los Reyes Católicos mantuvieron con Toledo es sin lugar a dudas el Monasterio de San Juan de los Reyes, erigido para conmemorar su victoria tras la batalla de Toro (1476), un panteón real que finalmente no llegó a ser. En contra de numerosos tópicos, son muchos los testimonios de la época que alabaron la belleza de esta reina rubia (Michelle Jenner, Los hombres de Paco), que consideraba que, en comparación con Toledo, cualquier otra ciudad era «si tan grande, no tan fuerte; si tan fuerte, no tan grande».
El arzobispo Carrillo de Acuña (Pedro Casablanc). Nacido en tierras de Cuenca, Alonso Carrillo de Acuña (Pedro Casablanc, Hospital Central) fue obispo de Sigüenza y uno de los arzobispos de Toledo que más tiempo permaneció en esta dignidad, entre 1446 y su muerte, en 1482. Fue un personaje fundamental en la política castellana desde tiempos de Juan II, y un activo propulsor de su sobrino, Juan Pacheco, Marqués de Villena, tras la muerte en el cadalso de Álvaro de Luna en 1453. Participó en la ‘Farsa de Ávila’ y apoyó al aspirante portugués al trono del reino.
Juan Pacheco (Ginés García Millán). Adelantado de Castilla, merino mayor de Asturias, mayordomo mayor del rey Enrique IV... Pocos personajes han acumulado tanto poder como el personaje interpretado por Ginés García Millán, que recientemente interpretó a Adolfo Suárez en otra serie de TVE. Nacido en Belmonte, como su hermano Pedro Girón, Juan Pacheco se convirtió en primer marqués de Villena en 1445. Enemigo de los Mendoza, tomó partido por el infante Alfonso tras la ‘Farsa de Ávila’ y más adelante por la Beltraneja.
Pedro Girón (César Vea). De Pedro Girón (el actor César Vea, de Doctor Mateo y El laberinto del fauno), también nacido en Belmonte, desciende una de las casas nobiliarias más importantes de España, la de Osuna. El poder de esta maestre de la Orden de Calatrava fue tan importante que, tras su participación en la ‘Farsa de Ávila’, Enrique IV llegó a ofrecerle la mano de la propia Isabel. El acuerdo no llegó a formalizarse, pues murió prematuramente (es probable que tras una apendicitis) poco después, en el año 1466.
Enrique IV de Castilla (Pablo Derqui) y Juana de Avís (Bárbara Lennie). Son muchas las disposiciones que Enrique IV (Pablo Derqui, Hispania), al igual que los Reyes Católicos, dio relacionadas con Toledo. Sin embargo, una de las más simbólicas, por su largo recorrido en el tiempo, fue la institución del mercado franco de los martes, que en la actualidad se continúa celebrando. Aparece en la imagen junto a su esposa Juana de Avís (Bárbara Lennie, Amar en tiempos revueltos), de la que tuvo a Juana. Según parece, la concepción, nacimiento y bautizo de la Beltraneja ocuparán buena parte de esta primera temporada.
Gonzalo Chacón (Ramón Madaula). Ramón Madaula ya era un actor muy conocido en Cataluña antes de incorporarse a la serie de TVE Gran reserva. Interpreta a un gran humanista español, GonzaloChacón, uno de los poderosos que se mantuvieron fieles a Isabel desde su niñez. Nació en Ocaña y fue señor de Casarrubios del Monte, villa en la que Enrique IV proclamó como heredera a su hermanastra. Entre los cargos que ocupó destacan los de contador mayor de Castilla, comendador de Montiel y Caravaca, trece santiaguista y alcaide del Cimorro de Ávila y los Alcázares segovianos.