Menos del 10 por ciento de los edificios que han pasado este año la Inspección Técnica de Edificios han obtenido un informe desfavorable, es decir, tienen que hacer algún tipo de reforma. En 2013 eran un total de 270 los edificios obligados a pasar este control, ya que fueron construidos antes del 1 de enero de 1963 y cumplen medio siglo en el año recién acabado; de ellos, menos de 30 han contado con el voto negativo.

Curiosamente y según explicó a este diario la concejala de Urbanismo, María Rodríguez, ninguno de ellos ha necesitado una reforma estructural, sino que se trata de simples arreglos en el interior de los edificios o problemas como goteras. Ello responde, principalmente, a que muchos de ellos han sido previamente objeto de una rehabilitación integral.

La Inspección Técnica de Edificios es una prueba obligada para «garantizar la seguridad» de la infraestructura y de los vecinos que lo habitan, explica la edil del área.  Ese es el fin principal para un control que llevará a cabo una revisión visual por parte del técnico donde se controlarán aspectos como la estabilidad, la consolidación estructural y los elementos constructivos.

Tras esta revisión, que los profesionales envían al Ayuntamiento para confirmar que la prueba está en marcha, se pueden dar dos opciones: si el edificio no necesita ningún tipo de reforma, no habría más movimientos hasta dentro de cinco años, que tendría que volver a pasar la ITE. Por el contrario, si es desfavorable, la comunidad de vecinos o propietarios debe iniciar la rehabilitación de las anomalías encontradas con el correspondiente informe de patologías y el siguiente de actuación con las medidas que se han llevado a cabo. Tras ello, el técnico volverá para comprobar que la rehabilitación realizada ha sido la correcta y enviar un nuevo informe al Consistorio, en este caso ya positivo, con la finalización de la obra.

también los edificios municipales. Varios edificios de propiedad municipal se encuentran en la tesitura de pasar la Inspección Técnica de Edificios por contar con más de 50 años. Entre ellos se encuentra el propio Ayuntamiento, el antiguo Colegio de Nuestra Señora delPrado o la Basílica de la patrona de Talavera. En este sentido, la concejala de Urbanismo asegura que el Ayuntamiento se encuentra tramitando la inspección, fecha que finalizará el próximo 31 de enero.

Además de los que pertenecen al Consistorio, en la ciudad otros 3.160 edificios y 12.300 viviendas deberán pasar por este control en los próximos años, entre ellos los que forman parte de los catálogos del Plan de Ordenación Municipal (POM) y del Plan Especial de la Villa.

Se trata de un 30,5 por ciento de las infraestructuras que tiene Talavera de un total de 10.517 edificios y 41.000 viviendas, según los datos extraidos del informe elaborado por el Colegio de Aparejados, Arquitectos Técnicos e Ingenieros de Edificación de Toledo (COAATIE) quienes se harán cargo de estas revisiones junto al colectivo de arquitectos.