Que la tecnología está cada vez más patente en el deporte es un hecho y seguramente mucho más lo estará en los años venideros. Una muestra de ello la tendríamos en la matinal de este domingo en Talavera, donde aprovechando la estancia de La Vuelta Ciclista a España en la ciudad se llevaría a cabo un experimento pionero, nunca realizado hasta la fecha y que se aplicaba por primera vez al ciclismo.

La condición talaverana de ser Ciudad Tecnológica 5G, algo que comparte junto con Segovia, es lo que tiene, que convierte a ambas localidades en un banco de pruebas de lo que llegará en los próximos años a todo el territorio nacional. De la mano de Telefónica y de Ericsson, empresas punteras y aliadas en esta experiencia, se llevaría a cabo una demostración de lo que es capaz esta nueva red Pre-5G y, sobre todo, de un punto que le caracteriza sobre sus antecesoras, la baja latencia.

El concepto latencia sería referido a lo que se tarda en transmitir una información a la red y que ésta devuelve al usuario algo que con esta nueva tecnología en pruebas camina en el umbral entre uno y cinco milisegundos, prácticamente con un retardo mínimo, algo que se encargaría de demostrar todo un mito del ciclismo nacional como Pedro Delgado.

El segoviano, ataviado con unas gafas opacas, una cámara, un terminal a modo de transmisor y un receptor en la espalda sería capaz de recorrer un circuito de obstáculos preparados para la ocasión en la zona de La Alameda y hacerlo con toda la seguridad del mundo y sin titubear, como si de sus propios ojos se tratase, consiguiendo sustituir su visión, por una imagen del escenario, logrando que la percepción de sus sentidos no perjudicasen el equilibrio encima de la bicicleta.

«Las sensaciones al principio son de temor, pero luego le coges confianza. Porque me tengo que ir, que si no seguiría por aquí», espetaba un Pedro Delgado que además resaltaba las particularidades de este experimento: «Es algo inmediato, busco el giro y es como si fueran mis ojos».

«Cuando me comentaron el proyecto me pareció increíble. En su día el 3G era una revolución, pero es que el 5G lo será mucho más. Es increíble lo que inventa el hombre. Es que esto puede ayudar no solo al deporte, sino también a otros campos como a la medicina, donde un médico puede operarte desde Australia», apostillaba.

Como cabezas visibles de la iniciativa estaban tanto Jorge Navais (Director de la cuenta Telefónica en Ericsson) como Javier Gutiérrez (Director de Estrategia y Desarrollo de Red e Infraestructura TI de Telefónica) quienes quisieron explicar a los presentes la parte técnica del proyecto.

«La tecnología del 5G está madurando. Estamos probando prestaciones a nuevos servicios y cómo estos pueden tener capacidades. El 5G nos puede permitir controlar máquinas en remoto. Para ello hace falta un retardo muy remoto para el controlador y la máquina para tomar decisiones en tiempo real. Es una demostración un poco llevada al extremo, pero es un campo que estamos estudiando y madurando para cuando llegue a implantarse el 5G esté totalmente probado», comentaba Gutiérrez.

Por su parte Navais destacaba que en Ericsson «llevamos probando con el deporte en distintos eventos como las 500 millas o la NBA. Esta la primera vez en ciclismo y Pedro (Delgado) se ha convertido en nuestro probador».

De igual manera quería apostillar lo siguiente: «Vamos a llevar la tecnología a un punto en el que consigamos que el retardo sea nulo. Esta prueba es un adelanto que permite tener latencias tan bajas como apenas unos milisegundos».