La presentación del volumen Toledo Olvidado, una compilación de más de trescientas imágenes de la ciudad entre los varios miles de fotografías que durante los últimos años ha recopilado, clasificado y comentado Eduardo Sánchez Butragueño en su blog, fue calurosamente acogida en la sala de oración de la Sinagoga del Tránsito. Familiares, amigos y representantes de las instituciones culturales de la ciudad -entre ellos el exministro de Justicia Fernando Ledesma, presidente de la Real Fundación- dieron la bienvenida a la publicación. No en vano, recordó el responsable del libro, una parte considerable de los asistentes han contribuido a financiar la edición, puesto que Toledo Olvidado (DB) ha sido publicado mediante micromecenazgo a través de la plataforma Verkami.
«Evidentemente, no es el primer libro de fotografías que se publica en Toledo, pero sí el primero que surge de un blog, y que cobra forma a partir de este sistema de financiación», según el responsable de Toledo Olvidado, una iniciativa que hace años surgió como simples correos electrónicos con imágenes que Sánchez Butragueño distribuía entre sus conocidos, aficionados a ver fotografías antiguas de la ciudad. «Un amigo con experiencia en un blog, Mala Prensa, me propuso abrirlo a todo el mundo en este formato y así nació toledoolvidado.blogspot.com». Pocos años más tarde, este punto de encuentro para amantes de la fotografía y de la historia recibe miles de visitas y se ha convertido en un dinámico referente gracias a las redes sociales. No en vano, su creador recibirá la semana que viene uno de los Premios de la Real Fundación de Toledo de manos del príncipe de Asturias.
«La idea de seleccionar algunas de las imágenes y publicarlas en un libro fue cobrando forma más adelante, cuando alcanzamos la suficiente madurez». Si el blog sobre Toledo rompió moldes, lo mismo sucedió con el sistema elegido para financiar la publicación, el micromecenazgo, el cual «contribuye a romper un tópico muy extendido sobre Toledo, un sambenito de ciudad fría y poco involucrada en la cultura que nosotros mismos a menudo solemos colocarnos».
El resultado está compuesto por alrededor de trescientas fotografías que abarcan desde mediados del siglo XIX hasta la actualidad. Sánchez Butragueño ha establecido cuatro grandes bloques temporales: imágenes tomadas por los pioneros de la fotografía hasta 1900, fotografías entre esta fecha y 1936, imágenes de la Guerra Civil e instantáneas tomadas desde el final de la contienda hasta nuestros días.
«La diferencia de la crisis que atravesamos con respecto a otras es el desarrollo tecnológico al alcance de la sociedad. Internet y el micromecenazgo, en sus diferentes variantes, cristalizarán en cada vez más proyectos culturales. Incluso el Estado y las instituciones acabarán respaldando estas iniciativas». Acompañaron al responsable de Toledo Olvidado el presidente de la Real Fundación, David Blázquez, de la editorial DB, y el director del Museo Sefardí, Santiago Palomero, junto con alrededor de 350 personas que abarrotaron el recinto.