Los trabajadores de Atento-Toledo llevaron a cabo su segunda jornada de huelga después de que el 90% de ellos lo hiciera por primera vez el pasado lunes 30 de julio. La mayoría de estos trabajadores se ausentaron de su puesto de trabajo mediante dos parones, una hora por la mañana y otra por la tarde, como ya habían votado por unanimidad en las asambleas de su comité empresarial. Sin embargo, Unión Sindical Obrera (USO) decidió repetir su ausencia durante 24 horas para «hacer más daño a la empresa» llevando la contraria al resto de sus compañeros y al resultado de la votación.
Para Chelo Gómez, Presidenta del comité de empresa, la decisión de USO de actuar por libre les pilló de sorpresa a todos, ya que estos «se adhirieron al voto por unanimidad de hacer huelga durante dos horas ante la demanda de los compañeros que no podían permitirse hacer huelga durante un día completo porque tienen contrato parcial, como la mayoría de nosotros. Pero no se han molestado en explicárnoslo». Desde el punto de vista de USO, su secretario regional, Julián García, ha valorado su postura como «algo necesario para que la empresa se vea afectada, ya que dos horas no son suficientes para reivindicar lo que está ocurriendo en la empresa».
Al margen de los parones realizados por unos u otros representantes del comité, la segunda jornada de huelga vuelve a rondar las cifras del 90% para reivindicar la sobrecarga que los trabajadores están sufriendo con el llamado «plan de verano» de la empresa. Después de que la empresa siga ofreciendo un «no» como respuesta a las propuestas de los trabajadores, el número de la plantilla sigue reduciéndose hasta llegar a su 50%. De una plantilla de 600 trabajadores quedan 450 que, unidos a los profesionales que se encuentran de vacaciones o bajas de larga duración y excedencias, restan hasta dejar solo 300 personas para responder ante la misma carga de trabajo de siempre. Con todo esto, la empresa ha reconocido que la facturación con Movistar ha disminuido, por lo que ahora cobran por cada llamada y necesitan obtener más trabajo con menos personal. Para tratar de solucionar este asunto, los representantes del comité empresarial propusieron ampliar voluntariamente su jornada, obteniendo por parte de la empresa la misma negativa que en otras ocasiones.
Como consecuencia de que al finalizar la primera jornada de huelga la empresa no se movilizó en absoluto, el secretario regional de USO valora que «si a finales de agosto la situación sigue igual lo normal es que se realicen parones durante uno o dos días más».
Además, cabe destacar que Chelo Gómez decidió tomarse con humor este parón por la huelga cuando terminó su discurso de reivindicación afirmando que van a trabajar y a responder sus llamadas «despacito», al ritmo de la canción del cantante Luis Fonsi.