Manifestación «sin precedentes» en Toledo. Unas 24.000 personas según los sindicatos y 8.000 según la Delegación del Gobierno recorrieron ayer las calles de la capital regional para protestar por las medidas de recortes de los Gobiernos central y autónomico dentro de la jornada de huelga general, la segunda desde que Mariano Rajoy llegó a la Presidencia del país. Como estaba previsto, la marcha partió sobre las 18,30 horas de las inmediaciones de la Plaza de Toros mientras los ánimos seguían en pie. Todo ello a pesar del cansancio acumulado y después de, en algunos casos, estar casi 48 horas sin dormir.

Detrás de la pancarta de cabecera se situaron los secretarios provinciales de UGT y CCOO, Rubén Martín y Jesús García Villaraco, quien consideró que «el mayor despilfarro» lo representa el cincuenta por ciento de los jóvenes que se encuentran sin oportunidades laborales y se tienen que ir al extranjero en busca de trabajo.

Rubén Martín, por su parte, cifró el seguimiento de la huelga en el setenta por ciento en la provincia de Toledo, dato «un poco superior» al registrado durante el paro de marzo. Así, afirmó que la población está «mucho más concienciada» a la vez que destacó cómo algunas administraciones «intentaron hacer incumplir los servicios mínimos, en el Hospital de Talavera han obligado a entrar en quirófano a algunos médicos y en la Diputación también se han dado órdenes para la sustitución de personal». El sindicato estudia ahora la posibilidad de emprender acciones legales.

- Foto: Yolanda Lancha La manifestación avanzó sin incidentes y una hora después llegaba hasta la Plaza de Zocodover, momento en el que todavía acababa de salir gente de la Plaza de Toros. Los participantes corearon multitud de consignas, destacando sobre todo las que pedían la dimisión de la presidenta de Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal. A la altura del Miradero  realizaron una sentada para minutos más tarde abordar el final del recorrido.

En la Plaza de Zocodover esperaba un escenario iluminado, en el que comenzó la lectura del manifiesto a cargo de una integrante del Sindicato de Estudiantes. Después tomó la palabra el secretario provincial de UGT, Rubén Martín, quien resaltó que todas las voces que se unieron en la pasada jornada tanto en las concentraciones que hubo por la mañana como en las manifestaciones que recorrieron las calles de Castilla-La Mancha sirvieron para decir que «los ajustes han fracasado». Así, consideró que estas políticas de ajustes han tenido como consecuencia una crisis «económica, social y política» y lamentó que los dirigentes del Gobierno español se hayan «plegado» a los intereses de Merkel.

De este modo, Martín consideró que el Gobierno «debe rectificar» y que lo primero que tiene que hacer «es retirar el proyecto de Presupuestos Generales del Estado» así como convocar un referéndum para que los ciudadanos expresen su opinión acerca de las medidas de ajuste que se están abordando y, de esta forma, «devolver la voz a la ciudadanía». «No aceptamos que la única política contra la crisis sea el desempleo», apuntó también el secretario provincial de UGT, quien denunció una «regresión social sin precedentes» que llevará a más movilizaciones si la situación sigue como hasta ahora.

- Foto: Yolanda Lancha

ccoo. Después tomó el micrófono el responsable de CCOO en la provincia, quien criticó el daño que los recortes están haciendo sobre la educación y sobre el sistema sanitario, pero también sobre los trabajadores que pertenecen al sector público. Jesús García Villaraco aseguró que en marzo se alcanzará el «precipicio» alcanzando los seis millones de personas en desempleo.