La reunión del Consejo de Participación de los distritos del Casco Histórico y Azucaica, que se celebró el pasado lunes en el centro cívico del segundo barrio, abordó la  posibilidad de reforma del pavimento de la plaza San Vicente. El piso de este enclave, cruce de caminos en el casco y zona de paso de un importante volumen de tráfico rodado, ha sufrido un deterioro notable en los últimos meses. Los vecinos de la zona proponen que se mejoren las condiciones de un suelo resbaladizo, que no siempre drena bien y que es atravesado por un importante número de coches y vehículos comerciales. 

El pavimento de piedra alfombra una plaza irregular, con pendientes positivas y negativas. Este espacio es «uno de los que más tráfico soporta» dentro de la almendra del Toledo histórico, según explicó el representante de la Asociación de Vecinos La Mezquita que propuso en la asamblea de participación la reforma del firme. Este emplazamiento es, además un lugar habitual de parada de vehículos más pesados para actividades «de carga y descarga», especialmente para actividades de hostelería y comercio al por menor.

El hundimiento parcial del pavimento en algunos puntos de la plaza provoca «pequeños charcos los días de lluvia». La acumulación de agua, sumada al desgaste de la propia piedra, limita la adherencia de los transeúntes. El ponente aseguró que en la zona se han producido caídas recientes.