Parecía que jamás llegaría el momento pero al final ha llegado; el Madridejos ha salido por fin de los puestos de descenso. Los azulones tenían marcado este encuentro ante el Azuqueca como una verdadera final y la sacaron adelante a lo campeón, remontando un tanto en contra y no dejando opciones a los rojinegros en la segunda mitad.

Ganar, empatar o perder este choque tenía una trascendencia enorme en lo numérico pero también en lo anímico. Sabedores de la importancia capital de la cita, ambas escuadras comenzaron siendo un manojo de nervios. Las oportunidades de peligro se sucedían en ambas áreas fruto de la tensión.

Con las defensas como flanes, Goya desperdició un gol cantado desde el área pequeña y más tarde cruzó el esférico en demasía ante la salida de Sergio Sánchez –Javi Alonso, con un dedo roto, se pierde el resto de la temporada–. Eso por parte azulona, en cuanto a los rojinegros, Esaú tuvo en sus botas el 1-0, al igual que Pascu en un par de acciones peligrosas desde dentro del área de castigo que se quedaron en nada.

 Tanto el Azuqueca como el Madridejos atacaban a pecho descubierto y la llegada de los goles era cuestión de tiempo. Rascó premio primero el cuadro de Miguel López –en la grada tras la expulsión de la jornada anterior– al cabecear Miguelón un fantástico servicio de Pascu en un libre indirecto.

Sin embargo poco le duró la alegría a la parroquia local, puesto que de forma inmediata devolvió las tablas al luminoso el conjunto madridejense. Fue gracias a un gol de Richi en una clara indecisión de la zaga azudense que aprovechó para mantener la contienda equilibrada. Con temor a encajar un segundo tanto y la mosca detrás de la oreja, ambos equipos encararon el túnel de vestuarios con el empate a un tanto.

 Tras la reanudación, fue el Azuqueca quien salió con mayor brío gracias a alguna acción elaborada por banda y tímidos acercamientos al portal defendido por Toni. El cancerbero le arrebató el balón a Esaú cuando estaba a escasas pulgadas para rematar de cabeza y Pablo Jiménez disparó flojo desde el balcón del área. Las sensaciones eran buenas para los locales.

La remontada. Pero antes de cumplir el primer cuarto de hora llegó el primer zarpazo del Madridejos en esta segunda parte en forma de contra letal finalizada con destreza por Santamaría. Los futbolistas locales, eso sí, se quejaron de una falta previa.

A continuación, el cuadro de Miguel López reaccionó, con convicción y agallas, echándose hacia arriba. David Moreno se ofrecía en la medular y Pascu entraba en juego con cuentagotas, aunque aportando talento. Aún así, les faltaba a los locales ese último empujón en zona de finalización. Precisamente algo que le sobró al Madridejos; un nuevo contragolpe fulminante y un pase fantástico de Santamaría para Ángel Luis desembocó en el 1-3 que ponía las cosas muy de cara a los pupilos de Víctor Cea.

 Quedaban 25 minutos por delante pero el Azuqueca ya no se levantó de la lona. Lo intentó pero sin ideas, sin guión, con Miguelón de delantero centro, a base de pelotazos y centros a la olla. Tito mandó un remate a las nubes, también Charly lo intentó y un cabezazo del propio Miguelón se perdió por el lateral de la red.

Quién sí tuvo la suerte de cara fue Ángel Luis para marcar desde el centro del campo uno de los goles del año para el Madridejos y poner así la rúbrica a uno de los días más negros de la temporada para el Azuqueca. Los toledanos ahora dependen de sí mismos, todo un lujo si se tiene en cuenta de dónde venían, y les quedan tres finales para evitar un descenso de categoría que hace semanas parecía cercano.