Una brutal pelea entre bandas se salda con 4 detenidos, 3 de ellos heridos

i. g. villota | TOLEDO
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La reyerta se produjo a las cinco de la tarde en la calle río Tiétar del Polígono entre dos grupos de magrebíes que utilizaron palos de madera y botellas de vidrio para golpearse

La Policía registrando un vehículo, propiedad probablemente de uno de los implicados.

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Gritos, muchos gritos, voces de disputa. Es lo que escucharon los vecinos de la calle río Tiétar del Polígono residencial en torno a las cinco de la tarde de ayer. A esa hora se produjo una brutal pelea entre dos grupos de magrebíes que revolucionó al barrio. El suceso se saldó con cuatro detenidos, de los cuales tres resultaron heridos de carácter leve, según confirmó la Delegación del Gobierno de Castilla-La Mancha.

- Foto: Yolanda Lancha Los implicados en la reyerta utilizaron palos de madera y botellas de vidrio para golpearse, objetos muy contundentes, que acabaron abriendo la cabeza a más de uno. De hecho, horas después del suceso, aún podían verse gotas de sangre procedentes de la agresión en la zona donde se produjo el incidente.   

Hasta el lugar de los hechos se desplazaron tres UVI móviles para atender insitu a los heridos, quienes permanecieron sentados en un banco ubicado al lado de donde se produjo la disputa, aunque posteriormente fueron trasladados también al Hospital Virgen de la Salud. Además, el amplio dispositivo se completó con varias patrullas de la Policía Nacional y de la Policía Local.

Gran revuelo. Testigos presenciales del suceso cuentan que fue en torno a las cinco de la tarde cuando escucharon gritos, que no sabían de dónde procedían. Salieron a sus balcones y se encontraron con una imagen demoledora: un grupo de unas cinco o seis personas que se golpeaban con contundencia utilizando botellas de vidrio y palos de madera. Lo que provocó un gran revuelo.

Poco después, vieron aparecer a varias patrullas de la Policía que procedieron a detener a los implicados, aunque, según cuentan, «algunos consiguieron marcharse en un coche».

Añaden que la Policía Nacional registró minuciosamente un vehículo, que podría ser de uno de los implicados y estaba aparcado justo al lado de donde ocurrió la reyerta.

De hecho, a escasos metros quedaban horas después restos de sangre, cascos de botellas y palos de madera partidos, lo que indica la intensidad de la agresión.

Los testigos del incidente también comentan que vieron cómo uno de los detenidos tiraba a un descampado cercano «un objeto negro, que parecía una pistola». «Lo hizo cuando se percató de la presencia policial. Los agentes buscaron el objeto y lo encontraron», detallan.

Los residentes del entorno explican que conocen a los detenidos de vista pero no recuerdan que hayan estado implicados en peleas destacadas anteriormente, al menos en las inmediaciones de sus viviendas, aunque sí reconocen algún encontronazo. «Han discutido por llevarse un frigorífico tirado en la basura, pero nada más», sostiene.

En cualquier caso, sí han escuchado que en la zona se menudea con droga, lo que les preocupa especialmente porque hay muchos chavales jóvenes residiendo por allí.