44.000 euros para intervenir en 74 negocios del Casco

C.M
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El edil de Urbanismo anunció la consecución de la ayuda del Plan de Apoyo a la Competitividad del Comercio Minorista que servirá para comenzar la mejora de la señalética comercial y turística. Un ensayo de la Ordenanza de Publicidad y Rotulación

El día 27 de julio el Ministerio de Economía remitió al Consistorio la aceptación de la solicitud que desde el área de Promoción Económica se presentó al Plan Integral de Apoyo a la Competitividad del Comercio Minorista en España. La consecución de esta subvención -el 80% de la inversión presupuestaria en 55.000 euros- va a propiciar la puesta en marcha del proyecto de ‘Establecimiento y mejora de la señalética comercial y turística del Casco’ que, dicho sea de paso, se contempla como el paso previo a la implantación definitiva de la Ordenanza Ordenanza Reguladora de la Publicidad y Rotulación.

Norma aprobada por unanimidad en septiembre del pasado año y que tiene un plazo de adaptación de dos años. Esto es, los comerciantes y empresarios del Casco tienen un año más para adaptar sus establecimientos a la ordenanza citada.

Por ello, y con la intención de abordar este cumplimiento desde una estrategia «pedagógica y no coercitiva», Teo García explicó la actuación junto a representantes de Fedeto y Cámara de Comercio porque «además de apostar por la mejora del paisaje urbano, también ofrecemos un apoyo decidido al comercio local».

En este punto, y destacando que la intervención sólo supone para el Ayuntamiento el gasto de 11.000 euros, el responsable del área destacó la importancia de actuar «en dos ejes concretos» que van a ser «ejemplo de intervención» para el resto de los locales situados en el Casco que, en total, conforman una suerte de área comercial de 500 pequeños comercios distribuidos en torno a 50.000 metros cuadrados de superficie.

Así, y puesto que este entorno histórico se ha dividido -en el informe técnico de la ordenanza- en diez ejes de actuación en los que se detallan tanto el número de comercios y locales como sus aportaciones al ruido visual, el edil señaló que en este proyecto «se reforzará la línea del eje Bisagra-Zocodover y el trazado desde la Puerta del Cambrón hasta el Paseo del Tránsito» para llegar «a un total de 74 establecimientos». Porque en el primer eje la medida puede afectar -ya que la adaptación todavía es voluntaria- a 12 establecimientos turísticos, 19 locales de proximidad, 14 locales de hostelería y tres oficinas bancarias y de atención al público. Mientras, el segundo trazado elegido integra 16 establecimientos turísticos, cuatro locales de proximidad y once locales de hostelería.

Estas intervenciones se sustentan sobre una dotación presupuestaria establecida en torno a varios aspectos. Con este criterio, 4.000 euros se destinan a la redacción del documento completo y dirección técnica; 10.000 euros van a la supresión de señales acumulativas y distorsionadoras; 2.000 euros para la colocación de nuevas señales; y 39.000 euros para la sustitución de señales de publicidad y rotulación inadecuada, según la ordenanza municipal vigente. No hay que olvidar que esta norma alude a la necesidad de «mejorar la imagen de una ciudad que no es ni un gran bazar ni un escenario de cartón-piedra».

Bajo esta premisa, por tanto, se persigue suprimir las señales acumulativas o que distorsionen; retirar los elementos con deficiente colocación; eliminar las señales de eventos caducados; o evitar los impactos de algunos elementos que dificultan la accesibilidad y movilidad. En esta lista de ‘agravios’ con la imagen del urbanismo de la ciudad, consta la existencia de «hasta 27 tipos de carteles distintos» articulados en torno a «muchas variables». Este inventario contempla señales relativas, por ejemplo, a los ‘Itinerios Greco’, a las ‘Huellas de Santa Teresa’ o a las indicaciones referidas a las intervenciones de Cristina Iglesias.  

El informe redactado para establecer los criterios de la ordenanza -firmado por los arquitectos José Ramón de la Cal, Josefa Blanco Paz y Dolores Sánchez Moya- incluye los procedimientos relativos a la gestión de la norma y el establecimiento de una comisión de seguimiento como órgano colegiado de asesoramiento. En él están presentes todos los agentes, administraciones e instituciones implicadas y nace con vocación didáctica.

No en vano, Teo García reiteró la intención del Ayuntamiento de «ayudar en todo lo posible» a los empresarios tanto «para adaptarse» a la ordenanza como para «dispensar información, colaboración y asesoramiento» constante. Eso además de la implementación de ayuda con la puesta en marcha de una línea de ayudas de Apoyo al Comercio para este fin.