El PP tiene ya un plan diseñado para volver a gobernar el país y, por eso, anima a los suyos a estar «alegres» y «contentos» ante la próximas elecciones generales. Lo proclamó ayer el presidente del partido, Pablo Casado, asegurando que «la España de los balcones» se va a imponer el 28 de abril, en la convención sobre economía y empleo que se celebró en el Palacio de Congresos de Zaragoza, donde estuvo arropado por destacados dirigentes populares nacionales y autonómicos y por más de 400 asistentes.

Casado -quien acto seguido viajó a Aragón para asistir a la presentación de la candidata del PP a la alcaldía de Huesca, Ana Alós-, aprovechó el evento para pronunciar un discurso en clave electoral porque, tal y como reconoció, no han dejado de estar en campaña desde el Congreso Nacional de su partido. «Sabíamos que este Ejecutivo no se sostenía» indicó, y en alusión a Cataluña destacó:«Hemos detenido la «venta de España a los independentistas».

Ahora, aseveró, los ciudadanos «sensatos», «los que sacaron sus banderas al balcón» y los que el otro día en la plaza de Colón en Madrid «pidieron que no se siguiera humillando a la nación», se van a «imponer», por lo que animó a los simpatizantes a estar «contentos». «Vamos a ganar», subrayó.

Por otro lado, Casado se atribuyó el «punto y final» de la legislatura y la convocatoria de comicios anunciada por el presidente Pedro Sánchez para el 28 de abril. «Gracias al PP, el Gobierno ha tirado la toalla, porque les hemos encontrando negociando con los separatistas», puntualizó. Por ello, pidió el voto para su grupo y afirmó que «quien quiera aplicar el 155 en Cataluña tiene que marcar la casilla de los senadores populares».