Será la primera vez que un presidente del Gobierno español viaja a Davos desde 2010 -el año pasado lo hizo el Rey-. El último fue José Luis Rodríguez Zapatero, en un momento en que la economía nacional estaba en recesión y acercándose a la peor fase de la crisis, y tuvo que defenderla de multitud de críticas en un foro en que, además, estuvo junto al primer ministro griego, George Papandreu, cuyo país estaba ya en plena catarsis financiera. Ahora, el encargado de representar a España será el jefe de su Ejecutivo, Pedro Sánchez, con el objetivo de poner en valor su solidez. 

El líder del PSOE tiene previsto viajar hoy al Foro Económico Mundial que se celebra en la localidad Suiza, donde mantendrá reuniones con presidentes y consejeros delegados de grandes empresas. Se trata del número dos de Microsoft, Satya Nadella; el presidente y consejero delegado de Arcelor Mittal, Lakshmi Mittal; la consejera delegada de Booking.com Gillian Tans; la de Facebook, Sheryl Sandberg; el director ejecutivo de Amazon Web Services, Andy Jassy y la presidenta mundial de IBM, Ginni Rometty. 

Según fuentes de la Moncloa, Sánchez recibió más de 60 peticiones de encuentros bilaterales en Davos. Finalmente optó por no concertar reuniones con responsables políticos, con quien puede encontrarse en otros foros, sino con grandes firmas, en su mayoría tecnológicas y que tienen interés en expandirse en España -apuntan que en algún caso hay inversiones importantes en juego- y en conocer los planes del Gobierno. 

El presidente llegará por la tarde a Suiza y sus primeras actividades serán las reuniones con el número dos de Microsoft y con el responsable de Mittal. A las 18,00 horas está prevista su intervención ante el plenario, un evento que, a diferencia de la mayoría de los que se celebran en Davos, es público. La misma jornada a última hora se verá con la consejera delegada de Booking.com. 

En su intervención ante el plenario, Sánchez se centrará en defender que la economía tiene que estar al servicio de las personas, y no de sí misma. Así, habrá alusiones a la crisis, al auge del populismo y del nacionalismo, al aumento de la desigualdad y al crecimiento que, a su juicio, es más débil de lo que debería ser si se enfocase en las personas.