La presentación de la nueva temporada del Rojas fue propicia para aclarar ciertas dudas generadas en las últimas semanas sobre los plazos manejados en torno a la obra prevista en la escena del teatro. La pregunta fue explícita -si esta intervención iba a trastocar la programación- y la respuesta fue sorprendente. Porque Milagros Tolón zanjó el asunto asegurando que «las obras de mejora están terminadas», por lo que «no van a afectar a la programación» que, insistió, «se desarrollará con normalidad».

La alcaldesa completó esta información defendiendo una actuación «que puede surgir en cualquier edificio municipal porque cuando se tienen que hacer obras de mejora, se tienen que hacer». Todo esto minutos después de haber participado en la reunión del Consejo Rector del Patronato en el que se informó de que la actuación, ya concretada y licitada, comenzará el próximo 4 de octubre.

Pues bien, la mañana comenzó en los corrillos municipales -y escénicos- con el error/olvido de la alcaldesa en un asunto que ya ha generado más de un titular y que el propio Sabrido ya subsanó -el pasado día 13- aludiendo a que las obras «prioritarias» de momento no están en marcha pero «se ejecutarán enseguida, en concreto, a partir del día 3». De hecho, según las fuentes consultadas, los tiempos planteados por la empresa no ponen en riesgo las fechas de una programación que empieza el día 19 de octubre.

Sobre la intervención prevista y la dilatación de la misma, es importante señalar que el escrito de seguridad de los técnicos -del 4 de  julio- que instaba a solucionar algunos aspectos referidos al montaje de luces y a la instalación de elementos en altura sufrió los retrasos propios del verano. A lo que hay que añadir que se barajaron distintas opciones buscando las mejores y más sencillas actuaciones a ejecutar en un espacio como el Rojas.

Porque no hay que olvidar que no todas las posibilidades ofertadas por la empresa eran válidas para un edificio tan valioso tanto desde el punto de vista patrimonial como desde el aspecto constructivo. Razón de peso por el que se tuvo en cuenta un informe externo de las variaciones para lograr unas condiciones óptimas de los trabajadores que, claro está, tenían que ser adecuadas para el escenario y aprobadas por el arquitecto municipal tanto en su realización como en la selección de los materiales posibles.